El programa La Revuelta, liderado por David Broncano y su equipo, ha revolucionado la programación de La 1 de RTVE, atrayendo una gran audiencia con su formato fresco y desenfadado. Sin embargo, su estilo provocador ha generado polémica, especialmente en lo que respecta a bromas sobre drogas y lenguaje inapropiado, lo que ha llevado a RTVE a imponer ciertos límites para proteger su imagen de televisión pública.
Las bromas sobre drogas generan controversia
Desde su estreno, La Revuelta ha hecho reír a muchos, pero también ha recibido críticas. Varios chistes que hacen alusión al consumo de drogas han molestado a los espectadores y han provocado quejas, especialmente debido a que el programa se emite parcialmente en horario infantil. Comentarios como “Eso lo pillo yo hace unos años y me lo fumo”, en referencia a la caca cuadrada de un wombat, o gritos como “¡Farlopa!” en pleno directo, han llamado la atención de RTVE, que considera inaceptable este tipo de humor en una cadena pública. El canal ha insistido en que, mientras esté en la franja de access prime time, las bromas sobre drogas deben ser eliminadas.
Aunque David Broncano y su equipo venían de un entorno más permisivo como La Resistencia, emitido en una plataforma privada sin las mismas restricciones, en La Revuelta han tenido que adaptarse a un contexto diferente. La televisión pública exige un mayor control del lenguaje y los contenidos, especialmente en los horarios donde el público infantil aún puede estar presente. El equipo de La Revuelta ha aceptado las directrices de RTVE, comprometiéndose a moderar las bromas en las primeras partes del programa y reservar los contenidos más desenfadados para cuando ya no haya restricciones horarias. A pesar de esto, algunos días las bromas fuera de tono se han colado antes del horario permitido.
También señalan demanda de mayor presencia femenina
Otro de los puntos que RTVE ha señalado es la escasa representación femenina en el equipo de La Revuelta. Aunque el programa cuenta con la participación de Lalachus y Valeria Ros, la Corporación ha insistido en que es necesario aumentar la presencia de mujeres tanto en pantalla como detrás de las cámaras. Broncano y su equipo han aceptado este reto, y se espera que en futuras emisiones veamos una mayor diversidad en los colaboradores. Este cambio no solo responde a la presión de la audiencia, sino también a un compromiso por parte de la cadena pública con la igualdad de género.
A pesar de las polémicas, La Revuelta sigue siendo un éxito para RTVE. El programa ha conseguido aumentar la audiencia en su franja horaria, llegando incluso a extenderse más allá del tiempo previsto para competir con otros programas populares como El Hormiguero. No obstante, tanto Broncano como su equipo son conscientes de que están bajo el ojo público y que, como parte de una cadena pública, deben cumplir con unas normativas más estrictas que las de una televisión privada. Con el compromiso de ajustar sus contenidos, el programa busca mantener su esencia sin perder el respaldo de la audiencia ni comprometer la imagen de RTVE.
Estas medidas pretenden equilibrar la creatividad que caracteriza a La Revuelta con las exigencias de una televisión pública, garantizando así que el programa pueda seguir en antena sin generar más controversias. El desafío para Broncano y su equipo será mantener el equilibrio entre la libertad de expresión y el respeto a las normas audiovisuales de RTVE.