Conchita Wurst, la ganadora de Eurovisión en 2014 ha vuelto a sorprender a sus fans con un cambio radical de imagen, que ha divulgado a través de sus redes sociales.
No es la primera vez que Wurst juega con su look. El año pasado sin ir más lejos, se arriesgó con el rubio platino para la gala ‘Life Ball de Viena’, que recauda fondos contra el sida.
Ahora, ha ido más lejos y no solo ha dicho adiós a su larga melena, sino que se ha rapado la cabeza.