Suministros industriales: clave para el funcionamiento de la industria

Los suministros industriales juegan un papel crucial en el desarrollo y las operaciones de cualquier industria. Con ese término nos referimos a un abanico de artículos y herramientas necesarias a la hora de mantener y optimizar los procesos productivos.

Se adquieren en una empresa de suministros industriales y los usan en sectores como el de la energía, la construcción o la logística y van desde la maquinaria pesada hasta los pequeños componentes del tipo de los equipos de seguridad o los tornillos.

¿Qué clases de suministros industriales existen?

Hay muchos tipos, de manera que, aunque no podemos hablar de todos sí que vamos a hacerlo de los principales.

Herramientas manuales y eléctricas

Sin herramientas no se puede trabajar. Se emplean a todas horas y se clasifican en dos grupos: las manuales y las eléctricas. Dentro de los manuales encontramos los destornilladores, los martillos, las llaves, etc. En cuanto a las eléctricas, aquí entran los taladros, las amoladoras o las atornilladoras. Con ellas se aumenta la productividad, reduciendo el esfuerzo de los empleados.

Equipos de seguridad

La seguridad de los trabajadores siempre es lo más importante. Por eso, con el fin de evitar accidentes y garantizar su integridad física, existen diversos equipos de protección. Uno de ellos son los cascos, muy usados en la construcción, los cuales evitan lesiones en la cabeza si cae algún objeto pesado sobre el trabajador. También vemos gafas protectoras y tapones para los oídos.

No es raro que las extremidades estén en peligro en determinados trabajos, por lo que se protegen mediante los guantes o las botas de seguridad. Por último, las protecciones respiratorias son necesarias cuando se manejan productos químicos, polvos o gases que llegan a afectar a las vías respiratorias de los empleados.

Maquinaria pesada y ligera

Gracias al uso de las máquinas es posible realizar muchas tareas pesadas, las cuales sería casi imposible hacer manualmente. Existe la maquinaria pesada, como las excavadoras o grúas, con las que se mueven volúmenes enormes de material de forma rápida. Otra clase de maquinaria es la ligera, tornos, taladros industriales o sierras automáticas, que suelen estar en los talleres.

Elementos de fijación

Estos elementos de fijación se venden en el almacén de metales, pues casi siempre son metálicos y de materiales como el hierro o el acero inoxidable. Entre los más comunes encontramos los tornillos, las tuercas y los pernos, pero también hay remaches que ensamblan estructuras metálicas. En la construcción suelen utilizar mucho los clavos y las grapas, que unen paneles, madera, láminas, etc.

Lubricantes y químicos industriales

Todas las máquinas necesitan mantenimiento y para ello los lubricantes son muy importantes. Mediante los aceites y las grasas se reduce el desgaste de las piezas móviles. Cuando se taladra o se mecaniza es necesario refrigerar las herramientas, puesto que de lo contrario se sobrecalientan. Así, los fluidos refrigerantes se van aplicando a las brocas mientras taladran metal.

En cuanto a los químicos industriales, dentro de estos entornos siempre son muy necesarios para limpiar. La suciedad que se genera en la industria no es fácil de eliminar, por lo que hay que recurrir a productos específicos que pueden llegar a ser muy agresivos.