La Dirección General de Tráfico (DGT) ha introducido importantes modificaciones en los cursos de recuperación de puntos del permiso de conducir. Estas actualizaciones, que llegan después de casi dos décadas de la implementación del sistema de permiso por puntos, buscan adaptarse a las necesidades actuales de los conductores y mejorar la seguridad vial. Aunque las reformas afectan a todos los usuarios, los mayores de 65 años pueden verse especialmente perjudicados por los nuevos requerimientos y la creciente digitalización de los cursos. A continuación te contaremos cómo serán los nuevos cursos de recuperación de la DGT.
1DGT: Principales novedades en los cursos de recuperación de puntos
La nueva normativa de la DGT actualiza los cursos de recuperación de puntos con un enfoque más integral. El objetivo es que los conductores no solo recuperen los puntos perdidos por infracciones, sino que también refuercen sus conocimientos sobre seguridad vial y reflexionen sobre sus hábitos al volante. Para lograrlo, las dinámicas grupales han cobrado mayor protagonismo, permitiendo que los conductores compartan experiencias y analicen sus actitudes con la ayuda de profesionales y testimonios de víctimas de accidentes de tráfico.
Uno de los cambios más notables que implementará la DGT es la mayor duración de estos cursos. Para la recuperación parcial de puntos, el curso tiene una duración mínima de 10 horas, divididas entre una parte común y una parte específica, ajustada al tipo de infracciones cometidas. En este caso, los conductores pueden recuperar hasta cuatro puntos. Para la recuperación total del permiso, el curso tiene una duración mínima de 20 horas, con una estructura similar que incluye formación teórica, dinámicas de grupo y una sección específica centrada en el perfil del infractor.
Además, los cursos ahora incorporan la posibilidad de realizar parte del contenido de manera online, facilitando el acceso a quienes tengan dificultades de movilidad o vivan en zonas rurales. La digitalización de la formación representa un avance significativo en la modernización de la DGT, aunque también supone un reto para los conductores mayores, que pueden no estar familiarizados con las plataformas virtuales.