La reciente entrega de Deadpool y Lobezno ha sido una montaña rusa de emociones y sorpresas para los fans. Ryan Reynolds, el actor detrás del carismático antihéroe, ha compartido una anécdota en su Instagram que ha dejado a muchos con sentimientos encontrados. Aunque la película estuvo cargada de cameos inesperados y actores de la vieja guardia de Marvel, uno de los amigos más cercanos de Reynolds quedó fuera del montaje final, a pesar de los esfuerzos del actor por mantenerlo. A continuación, revelamos los detalles de este «enchufe» que lamentablemente no llegó a la pantalla.
1Un cameo que no sobrevivió al corte final
Ryan Reynolds no dudó en invitar a su amigo y copropietario del Wrexham AFC, Rob McElhenney, a formar parte de Deadpool y Lobezno. McElhenney, conocido por su papel en la serie It’s Always Sunny in Philadelphia, voló hasta Londres para rodar su cameo. Sin embargo, según lo revelado por Reynolds, la secuencia no funcionaba como se esperaba y tuvo que ser eliminada en la fase de edición. A pesar de los esfuerzos del actor por mantener la escena, el cameo no sobrevivió al corte final, algo que lamentó profundamente.