Un hombre viajó durante cuatro horas en auxilio de su madre herida y consiguió llegar a su domicilio antes de que lo hiciera una ambulancia.
Mark Clements cogió un autobús, el metro y dos trenes para viajar desde Londres a Devon después de que su madre se cayera y se rompiese la cadera, tal y como ha informado la ‘BBC‘.
Clements recorrió 320 kilómetros y llegó antes que la ambulancia que se encontraba a menos de 10 minutos del lugar de los hechos.
El primer aviso a Urgencias se recibió a las 9 de la mañana lo que significa que la mujer de 77 años tuvo que esperar siete horas hasta que fuera atendida, tal y como informa el ‘Daily Mail ‘.
«Mi madre se encontraba tirada en el suelo y no era capaz de moverse», protestó el hijo. «El parque de ambulancias se encontraba a menos de diez minutos de la casa de mi madre», continuó. «A pesar de nuestro esfuerzos por mantenerla caliente, estaba helada y solo quería morirse. Fue durísimo para mi padre», continuó.
South Western Ambulance Service, empresa responsable de las ambulancias, se disculpó por lo sucedido y argumentó que ese día recibieron «un inesperado incremento» en las llamadas de urgencias.
La madre de Clements fue operada en domingo y se recupera en el hospital.