La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 39 años de edad en la comarca de la Ribera (Valencia), tras haber sido acusado de violar a su sobrina de 13 años durante meses. Tras presentar la denuncia, la menor ha pasado a estar bajo custodia para evitar represalias.
Según ha informado el diario ‘Levante’, los familiares del presunto violador trataron de rociar con gasolina a la adolescente para quemarla, por lo que la menor tuvo que huir por los tejados. Ahora, el Juzgado de Instrucción número 7 de Alzira que se encarga del caso investiga las supuestas amenazas contra la víctima y su familia.
El presunto agresor, que está previsto que pase a disposición judicial en las próximas horas, fue ingresado en el centro penitenciario de Picassent este jueves y, según ‘Las Provincias’, tras haberse acogido a su «derecho a no declarar por consejo de su abogado, manifestó en su alegato final ante la jueza que las acusaciones contra él se debían a una venganza por parte de la madre de la menor».
Al parecer, solicitó la custodia de la adolescente, junto a la abuela, porque la madre «lleva una vida desordenada» y esta petición habría provocado el enfado de la progenitora. Según su abogado, Francisco Aparicio, la menor declaró que había mantenido las relaciones sexuales sin haber sido forzada por su tío y atribuyó esta relación a las costumbre de la etnia gitana.
En el marco de este caso, se investiga además las relación de las dos hermanas también menores de la víctima con el tío, y si veían películas porno con él