En el mundo del diseño, pocas figuras han dejado una huella tan imborrable como la de Miguel Milá, el diseñador industrial e interiorista barcelonés que falleció este martes a los 93 años de edad. Milá, considerado uno de los pilares del diseño español, ha dejado un legado que trasciende más allá de sus creaciones y se ha convertido en una inspiración para generaciones de diseñadores.
Su trayectoria profesional, que se remonta a más de seis décadas, ha sido marcada por una destacada contribución a la industria del diseño, tanto a nivel nacional como internacional. Desde sus inicios colaborando en el despacho de los arquitectos Alfonso Milá (su hermano) y Federico Correa, hasta la fundación de la empresa Trabajos Molestos, más conocida como Tramo, junto a los arquitectos Francisco Ribas y Eduardo Pérez, Milá ha dejado una huella indeleble en el mundo del diseño.
La Innovación como Sello de Identidad
Miguel Milá fue un incansable innovador, y sus diseños lo demuestran. Desde las icónicas lámparas TMC (1958) y TMM (1961), creadas a través de Tramo, hasta otros diseños destacados como la lámpara Cesta (1964) y la M68 (1968), Milá supo desarrollar piezas que se convirtieron en auténticos clásicos del diseño español.
Más allá de las lámparas, el diseñador catalán también dejó su impronta en otros productos, como la manecilla de puerta para FSB, el cenicero paragüero Túmbalo, el banco NeoRomántico Clásico, el NeoRomántico Liviano y el Neocombo. Estas creaciones, que abarcan una amplia gama de categorías, demuestran la versatilidad y el talento de Miguel Milá.
Un Pionero en el Ámbito del Diseño Industrial
En 1960, Miguel Milá dio un paso decisivo en su carrera al convertirse en uno de los fundadores de la sección de diseño industrial del Foment de les Arts Decoratives (Adi-Fad), junto a destacadas figuras como André Ricard, Antonio de Moragas, Oriol Bohigas y Rafael Marquina. Este hito marcó el inicio de su papel como pionero en el desarrollo y la promoción del diseño industrial en España.
A lo largo de su trayectoria, Milá fue reconocido con numerosos galardones que destacaron su aportación al diseño. En 1987, se convirtió en el primer ganador del Premio Nacional del Diseño, demostrando su liderazgo y su impacto en la industria. Además, fue condecorado con la Creu de Sant Jordi (1993), el premio Compasso d’Oro internazionale (2008) y la medalla al Mérito de las Bellas Artes (2016).
Recientemente, en 2024, Milá recibió el Madrid Design Festival Award por su influencia en la historia del diseño español, y el Ayuntamiento de Barcelona le otorgó la Medalla de Oro de Barcelona por su «trayectoria profesional como pionero del diseño industrial.
El legado de Miguel Milá queda reflejado en la custodia de su Fondo Miguel Milá en el Museu del Disseny de Barcelona, un tesoro que alberga más de 2.000 documentos, incluyendo planos, material fotográfico, maquetas y bocetos, que evidencian la riqueza y la diversidad de su trabajo.
La partida de Miguel Milá deja un vacío en el mundo del diseño español, pero su influencia y su legado permanecerán vivos, inspirando a las generaciones venideras de diseñadores a seguir sus pasos y a continuar innovando y transformando la industria.
