Y es que los pueblos de España no dejan de sorprender. Ubicado en la provincia de Castellón, Morella ha capturado la atención de National Geographic y se ha convertido en uno de los destinos más destacados del turismo rural internacional. Este encantador pueblo amurallado no solo destaca por su impresionante patrimonio histórico, sino también por su rica gastronomía y su atmósfera única. Si estás planeando una visita, aquí te damos algunos tips: no te pierdas la Basílica Arciprestral Santa María la Mayor, explora la muralla y sus torres, y deléitate con la gastronomía local.
1Un viaje en el tiempo: La Muralla de Morella
La muralla de Morella, con casi dos kilómetros de longitud, es uno de los símbolos más emblemáticos del pueblo. Construida en el siglo XIV, esta fortificación ha sido testigo de numerosas guerras y cambios históricos. Al caminar por sus rampas y torres, como la de Sant Miquel, podrás sentirte como un aventurero medieval explorando las antiguas defensas de la ciudad. La muralla no solo ofrece vistas panorámicas impresionantes, sino que también conecta a los visitantes con el pasado glorioso de Morella.
