El presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, ha afirmado que la responsabilidad de una posible detención del expresidente Carles Puigdemont si regresa es del Tribunal Supremo (TS). Esto se ha dicho en una rueda de prensa, en la que también se ha cuestionado si el pleno de investidura de un presidente de la Generalitat debería suspenderse en caso de detenerse a Puigdemont, como solicita Junts.
Aragonès ha defendido que Puigdemont debe volver «en plena libertad, como debería producirse aplicando la Ley de Amnistía«, y ha añadido que conoce el posicionamiento del TS, que ha considerado textualmente contrario a esta ley. También ha asegurado que el Govern en funciones trabajará al máximo para que se cumpla la Ley, «sabiendo que hay un TS que toma las decisiones».
El Acuerdo de Claridad, la solución al conflicto de soberanía
Aragonès ha asegurado que al final de su presidencia «queda pendiente dar respuesta a la razón de fondo del conflicto de soberanía con el Estado», que es, según él, la voluntad de Catalunya de decidir libremente su futuro político. «Nuestro horizonte es la independencia. Que nadie dude que cada paso que hemos dado, damos y daremos va orientado en esta dirección», ha dicho.
Por eso, ha reivindicado la propuesta de Acuerdo de Claridad, que ha definido como un gran acuerdo para consensuar las bases para que se celebre un referéndum sobre la independencia de Catalunya. Ha admitido que la propuesta «quizás llegó demasiado pronto» pero que marca el camino a seguir.
Negociación y diálogo, claves para avanzar
Aragonès ha subrayado que en su legislatura se ha profundizado más en la negociación y el diálogo «para abordar el conflicto político con el Estado». Ha defendido que este compromiso ha permitido avanzar y que Catalunya logre «las cotas de autogobierno más relevantes de los últimos años».
Esto demuestra que el presidente en funciones de la Generalitat está comprometido con encontrar una solución al conflicto político entre Catalunya y el Estado español. La reivindicación del Acuerdo de Claridad y el énfasis en la negociación y el diálogo son pasos clave para avanzar hacia una resolución del conflicto de soberanía.
El enfoque de Aragonès se basa en la voluntad de Catalunya de decidir libremente su futuro político, algo que considera el «horizonte» de su acción de gobierno. La aplicación de la Ley de Amnistía y el respeto a las decisiones judiciales, aunque discrepantes, también forman parte de su estrategia para avanzar en el proceso.
En resumen, el presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, ha reafirmado su compromiso con la independencia de Catalunya y ha reivindicado el Acuerdo de Claridad como la solución al conflicto político, a través de la negociación y el diálogo con el Estado español.