En un giro político trascendental, el pacto alcanzado entre el Partido Socialista de Cataluña (PSC) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) para investir a Salvador Illa como presidente de la Generalitat ha sido recibido con una mezcla de preocupación y escepticismo por parte de la diputada de la Candidatura de Unidad Popular (CUP), Laia Estrada.
La representante de la CUP ha declarado que este acuerdo «certifica la muerte del procés», haciendo referencia al movimiento independentista catalán. Además, ha advertido que la consecución de este pacto estará sujeta a los delicados equilibrios políticos en el ámbito estatal, lo que pone en duda su garantía de cumplimiento.
La Estrategia de Pactos con el Estado
Estrada ha criticado a ERC y a Junts por Cataluña por seguir una estrategia de pactos con el Estado que, a su juicio, «suena a los viejos tiempos del pujolismo». Según la diputada, con este acuerdo, ERC ha abandonado el «horizonte independentista» a cambio de una financiación singular y una política social que, a su entender, no aborda los problemas sociales de fondo en Cataluña.
Además, Estrada ha señalado que el acuerdo evita abordar el «conflicto» entre Cataluña y el Estado, y no reconoce el derecho de autodeterminación. Asimismo, ha expresado su preocupación por la posibilidad de que se sigan impulsando grandes proyectos como el cuarto cinturón y la ampliación del Aeropuerto de Barcelona, algo que, en su opinión, va en contra de las necesidades de la población.
La Financiación Singular y la Soberanía Fiscal
En cuanto a la financiación singular prometida, Estrada ha subrayado que esto no certifica que Cataluña vaya a tener soberanía fiscal y económica, ya que, para ella, esto implicaría poder decidir la estructura impositiva, los impuestos que se cobran y la progresividad de los mismos.
La Incertidumbre del Acuerdo
Finalmente, Estrada ha manifestado que no existe «ninguna garantía de cumplimiento» de los contenidos del acuerdo, debido a que la mayoría de las decisiones no dependen de las instituciones catalanas, sino de los equilibrios políticos y las circunstancias que se den en la política estatal.
La diputada de la CUP también ha criticado el acuerdo entre el PSC y los Comuns, a quienes ha acusado de intentar «lavar la cara» al PSC al presentarse como progresistas, cuando, en su opinión, comparten buena parte del programa con Junts por Cataluña.
En conclusión, el pacto para investir a Salvador Illa como presidente de la Generalitat ha generado una gran incertidumbre y preocupación entre los sectores más independentistas de la política catalana, quienes ven en este acuerdo un retroceso en la lucha por la soberanía y los derechos nacionales de Cataluña.