En un entorno económico y geopolítico marcado por la incertidumbre, la compañía vasca Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) ha logrado superar con éxito los retos del primer semestre del año 2024. Con un incremento del 52% en el beneficio neto y un aumento del 11% en las ventas, la empresa ha demostrado su capacidad de adaptación y su sólida posición en el mercado.
A pesar de una ligera caída en la contratación, la cartera de proyectos de CAF sigue siendo robusta, con un valor de 13.843 millones de euros. La compañía ha subrayado que esta elevada cartera de pedidos garantiza buena parte del crecimiento proyectado hasta 2026, gracias a un aumento de las ventas, una mejora de la rentabilidad operativa y un aumento relevante de los resultados.
Fortaleza Financiera y Operativa
La fortaleza financiera de CAF se ha visto reflejada en diversos indicadores clave. La deuda financiera neta creció un 11%, pero gracias al incremento del Ebitda, la proporción del pasivo respecto a esta partida se mantiene en solo 0,9 veces. Además, la liquidez de la compañía asciende a 926 millones de euros, lo que le confiere una sólida posición para hacer frente a los retos futuros.
En cuanto a la eficiencia operativa, el Ebit de CAF creció un 20% en el primer semestre, superando el aumento de las ventas. Esto demuestra una mejora en la rentabilidad de la empresa, lo cual se alinea con los objetivos establecidos en su Plan Estratégico.
Riesgos y Desafíos: El Conflicto en Israel
Aunque los resultados de CAF en el primer semestre han sido positivos, la compañía reconoce que el conflicto entre Israel y Palestina supone «un riesgo de incertidumbre» para los dos proyectos que tiene en la zona: la extensión del tren ligero en Jerusalén y el suministro de tranvías para Tel Aviv.
CAF admite que el conflicto está afectando a los ritmos de ejecución de los contratos y apunta a la posibilidad de «embargos o sanciones» que se puedan implantar o «posibles interrupciones adicionales en la cadena de suministro«. En este sentido, la empresa destaca que se están manteniendo las operaciones en la línea del tren ligero de la ciudad de Jerusalén, si bien no detalla el estado en el que se encuentra el otro proyecto.
A pesar de estos desafíos, CAF defiende que mantiene comunicaciones continuas con sus clientes, «trabajando de forma colaborativa en abordar los problemas derivados de esta situación». Esta actitud proactiva y de cooperación puede ser clave para minimizar los impactos del conflicto en Israel y preservar los proyectos de la compañía en la región.