El sábado, la selección española de balonmano debutó en los Juegos Olímpicos de Tokio con una victoria sobre Eslovenia por 25-22. El lateral español Alex Dujshebaev compartió sus impresiones sobre el partido, señalando que el equipo estuvo «un poco ansioso y nervioso» al inicio, pero que lograron recuperar su «identidad» en la segunda mitad.
Dujshebaev explicó que para muchos de los jugadores, este era su primera experiencia olímpica, lo que se reflejó en la ansiedad y los nervios que se hicieron evidentes en la primera parte del partido. Sin embargo, después del descanso, el equipo se «liberó» y pudo volver a mostrar su característico juego colectivo, con una gran defensa.
La Recuperación del Equipo: Claves para la Victoria
El jugador destacó que la reacción del equipo en la segunda mitad demuestra «mucho» de un grupo que «nunca» se va de los partidos y «siempre pelea». Según Dujshebaev, entrar a la competición con una victoria era clave, ya que «las dinámicas se notan mucho» en este tipo de eventos.
Dujshebaev reconoció que el hecho de llevar despiertos desde las «5 de la mañana» pudo jugarles «una mala pasada» en la primera parte del encuentro. No obstante, el equipo logró sobreponerse a esta adversidad y terminar imponiendo su superioridad, especialmente en la segunda mitad del partido.
Mirando Hacia Adelante: El Reto de Suecia
El próximo rival de España será Suecia, uno de los «máximos candidatos a pasar el grupo, a estar en la pelea». Dujshebaev aseguró que el equipo español «va a darlo todo para ganar» este próximo encuentro, demostrando una vez más su determinación y compromiso con la camiseta de la selección.
El debut olímpico de la selección española de balonmano ha sido, sin duda, una prueba de carácter para un equipo que, pese a los nervios iniciales, supo encontrar su identidad y terminar imponiéndose a un rival complicado como Eslovenia. Ahora, con la mirada puesta en el siguiente partido, los jugadores españoles se preparan para afrontar un nuevo desafío en su camino hacia el éxito olímpico.