En un momento de incertidumbre económica a nivel global, los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del segundo trimestre de este año han arrojado luces y sombras sobre la situación del empleo en España. La Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), una voz representativa de este crucial sector empresarial, ha realizado un análisis exhaustivo de estos resultados, destacando tanto los aspectos positivos como los desafíos que enfrentan las pymes.
EL DESEMPEÑO DEL SECTOR PRIVADO Y LA PREOCUPACIÓN POR LA RALENTIZACIÓN
Cepyme ha resaltado el «buen comportamiento del sector privado», que ha sido el principal motor de la creación de empleo en este período, generando más de 427.000 nuevos puestos de trabajo. Este impulso se debe principalmente al auge del sector servicios y la actividad turística, que ha aportado cerca de 208.000 empleos. Sin embargo, la organización también ha subrayado que el ritmo de crecimiento del empleo ha disminuido en un punto porcentual respecto al primer trimestre, lo que refleja una «ralentización en el ritmo de creación de empleo», especialmente preocupante en un período tradicionalmente favorable para el empleo como el verano.
Ante este escenario, Cepyme ha expresado su inquietud por el impacto que la desaceleración económica en Europa y a nivel internacional pueda tener sobre las empresas españolas, especialmente las pymes, que se encuentran «más debilitadas que sus homólogas europeas» debido a un contexto de «continuos incrementos de costes y deterioro de la productividad».
LAS DIFICULTADES PARA ENCONTRAR TRABAJADORES Y LA NECESIDAD DE REFORMAR LOS SERVICIOS PÚBLICOS DE EMPLEO
Uno de los aspectos más preocupantes destacados por Cepyme es la «dificultad» que las empresas siguen presentando para encontrar trabajadores que cubran sus necesidades de personal. Esta situación contrasta con la persistencia de una tasa de paro que supera el 11% en España, lo que la organización califica como «contradictoria».
Según Cepyme, este problema se ve agravado por el aumento de nuevos demandantes de empleo que llegan a España en busca de trabajo. En este sentido, la Confederación ha insistido en la necesidad de reformar los servicios públicos de empleo para mejorar su eficacia a la hora de vincular las ofertas y las demandas laborales, algo especialmente crucial para las pequeñas y medianas empresas.
EL DESIGUAL COMPORTAMIENTO DE LOS SECTORES DE ACTIVIDAD
Cepyme también ha advertido sobre el «desigual comportamiento» de los sectores de actividad en lo que respecta a la creación de empleo. Particularmente preocupante es la evolución en el sector agrícola, donde el número de ocupados se ha reducido en 4.300 en tasa interanual, manteniendo una tendencia de pérdida de puestos de trabajo que se remonta a 2021.
La organización atribuye esta situación al «incremento de costes de todo tipo, incluidos laborales, que afectan de manera especial a este sector y dificultan su actividad». Esta realidad pone de manifiesto la necesidad de implementar medidas que apoyen y fortalezcan a los sectores más vulnerables, como el agrícola, para garantizar su sostenibilidad y contribución al empleo.
En conclusión, el panorama del empleo en España presenta un escenario heterogéneo, con luces y sombras que deben ser abordadas de manera integral. Cepyme ha hecho hincapié en la necesidad de reducir la inseguridad jurídica y generar un marco estable e incentivador de la actividad productiva, evitando medidas que supongan nuevos costes y trabas para las empresas, especialmente las pymes, que representan la columna vertebral de la economía española.
