El ICO todavía no brindó su dispensa a Magyar Vagon ante el posible cambio de control de Talgo

Talgo, la reconocida empresa española de fabricación de trenes de alta velocidad, se encuentra en una situación delicada debido a la Oferta Pública de Adquisición (OPA) lanzada por el grupo húngaro Magyar Vagon. Esta operación, que podría suponer un cambio de control en la compañía, aún no ha recibido el visto bueno del Instituto de Crédito Oficial (ICO), entidad dependiente del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa.

Según fuentes cercanas a la operación, más de veinte bancos han otorgado sus dispensas al oferente húngaro, lo que indica el amplio respaldo financiero que tiene esta propuesta. Sin embargo, el ICO, que es uno de los principales acreedores de Talgo, aún no ha dado su aprobación a este cambio de control.

La Importancia del Apoyo Bancario

Talgo trabaja de manera recurrente con una amplia red de entidades de crédito, entre las que se encuentran Banco Santander, CaixaBank, BBVA, Bankinter, Kutxabank, Ibercaja, Cajamar, Sabadell y el propio ICO, así como con el Banco Europeo de Inversiones (BEI), Commerzbank, Crédit Agricole y Barclays a nivel europeo. Estos bancos financiadores estudian minuciosamente aspectos como el origen del capital, los últimos beneficiarios, la capacidad financiera del oferente y sus planes para la sociedad.

A pesar de que la mayoría de estos bancos ya han otorgado sus dispensas, el ICO aún no ha dado luz verde a la operación. Este hecho es significativo, ya que el ICO depende del mismo Ministerio que debe pronunciarse sobre la aprobación o el veto de la OPA. Según las fuentes, el ICO ya habría completado los trámites habituales para emitir su dispensa, lo que sugiere que su decisión final podría tener un peso crucial en el destino de esta adquisición.

Las Suspicacias Gubernamentales

Además de la falta de aprobación del ICO, el Gobierno también se enfrenta a otros desafíos en torno a esta OPA. Por un lado, existe la preocupación por el origen del capital del grupo húngaro, ya que el 45% de este está controlado por el Estado de Hungría, cuyo Gobierno está liderado por Viktor Orbán, en pleno conflicto con la Unión Europea. Por otro lado, el Ejecutivo también relaciona esta operación con la extrema derecha, lo que agrava aún más las suspicacias en torno a la misma.

Sin embargo, las fuentes consultadas aseguran que el amplio apoyo de los bancos financiadores eliminaría cualquier sospecha relacionada con una supuesta exposición a Rusia, uno de los argumentos que el Gobierno podría utilizar para vetar la operación.

En resumen, la OPA lanzada por el grupo húngaro Magyar Vagon sobre Talgo se enfrenta a una compleja situación, en la que el papel del ICO y las preocupaciones gubernamentales serán determinantes para el futuro de esta operación. La solidez financiera y el respaldo bancario de Talgo podrían ser claves para superar las barreras que se interponen en el camino de esta adquisición.