Un oso polar, supuestamente hambriento, sorprendió a los 120 tripulantes del submarino nuclear ruso Delta IV cuando se subió sobre su armazón en busca de comida.
Los militares emergieron de las profundidades en el archipiélago noruego de Svalbard, donde se encontraban realizando maniobras.
El animal al divisar la nave se abrió paso hasta la cubierta atraído por los desechos orgánicos de los que los marineros iban a deshacerse.
“Tenemos sistemas establecidos para clasificar, reciclar y eliminar la basura de una manera respetuosa con el medioambiente” declararon responsables de Marina rusa al ‘Sunday Express‘.
#polarbear leaps onto Russian nuclear submarine [north of Svalbard, Norway] on the search for food https://t.co/fcRjgtDPzT via @MailOnline
— Susan Crockford (@sjc_pbs) 13 de enero de 2019