La temporada de playa está en pleno apogeo, y con ella resurge una práctica tan arraigada como controvertida: la reserva anticipada de espacio mediante sombrillas y otros objetos. Sin embargo, lo que para muchos es una costumbre veraniega, se ha convertido en un problema que diversos municipios costeros están decididos a erradicar. Desde Andalucía hasta la Comunidad Valenciana, pasando por Murcia, los ayuntamientos han implementado ordenanzas que prohíben dejar sombrillas desatendidas en la playa, imponiendo multas que pueden alcanzar los 3.000 euros.
Aquí te contaremos que motivos han llevado a las autoridades aplicar estas elevadas multas.
1Multas vs. sombrillas: una batalla costera que se libra cada verano
El ritual es conocido por todos los asiduos a las playas españolas: madrugar para plantar la sombrilla en primera línea de playa, asegurando así el mejor sitio para disfrutar del día. Esta práctica, que se ha convertido en una auténtica competición veraniega, genera no solo molestias entre los bañistas, sino también problemas de seguridad y gestión del espacio público.
La imagen de playas salpicadas de sombrillas solitarias durante las primeras horas de la mañana es un clásico del verano español. Sin embargo, esta costumbre limita el disfrute equitativo de las playas y puede obstaculizar el trabajo de los servicios de emergencia. Además, genera conflictos entre los usuarios, especialmente cuando las sombrillas «reservadas» permanecen sin ocupar durante horas.
Los ayuntamientos costeros, conscientes de la creciente frustración de los veraneantes y de los problemas de gestión que esta práctica conlleva, han decidido tomar cartas en el asunto. La solución: implementar ordenanzas municipales que prohíben expresamente dejar objetos personales desatendidos en la playa con el fin de reservar espacio.
Veamos en la siguiente página los lugares de España donde se ponen estas multas, porque no son todos.
