La comunidad científica no sale de su asombro después de que la prestigiosa revista especializada ‘The England Journal of Medicine’ publicara la fotografía del coágulo de sangre que se formó en el interior del cuerpo de un paciente y que acabó costándole la vida.
En la imagen se puede apreciar como el trombo tiene la forma exacta de unos bronquios y fue expectorado por un paciente de 36 años después de haber tosido con cierta intensidad. Desgraciadamente, el enfermo, falleció a los pocos días.
El paciente había sido ingresado en el hospital debido a una insuficiencia cardiaca. En declaraciones a ‘The Atlantic‘, Wiesel Thaler, el médico cirujano experto en trasplantes que lo atendió, comentó que el corazón del enfermo fue conectado a una bomba para incentivar el flujo de la sangre a través de su sistema cardio-vascular; además, los especialistas le suministraron un anticoagulante para impedir la formación de grumos.
La primera hipótesis que barajan los facultativos para explicar la extraña forma del trombo es que cierta cantidad de sangre se desvió a los bronquios del paciente y allí se solidificó.
Durante varios días, el enfermo estuvo tosiendo pedazos de sangre hasta que finalmente, tras un ataque de tos prolongando acabó esputando el coágulo.
Desafortunadamente, pasados unos días, el paciente falleció.