El ‘acero verde’ bajaría las emisiones de CO2 de los coches europeos en 7 millones de toneladas

La industria automotriz se enfrenta a una creciente presión por reducir su huella de carbono. Según un nuevo análisis publicado por la Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente (T&E), el uso de acero fabricado con hidrógeno verde y hornos de arco eléctrico, o producido a partir de chatarra, puede reducir significativamente las emisiones de CO2 de la producción de automóviles en Europa.

Este avance podría equivaler a evitar las emisiones anuales de 3,5 millones de automóviles que utilizan combustibles fósiles. A medida que las emisiones de los tubos de escape se reducen a cero y el sector automovilístico se esfuerza por alcanzar las «emisiones cero» en 2050, el impacto climático de la producción de vehículos está cada vez más bajo la lupa.

La Oportunidad del Acero Verde en la Industria Automotriz

Según el análisis de T&E, el cambio a un 40% de acero ecológico añadiría tan solo 57 euros al precio de venta de un vehículo eléctrico en 2030. Además, pasar al 100% de acero ecológico en 2040 costará tan solo 8 euros (en comparación con el uso de acero convencional) debido a la fijación de precios del CO2 y a la caída de los costes de producción de acero ecológico.

No obstante, asegurar los miles de millones de euros de inversión necesarios para la producción de acero con bajas emisiones de carbono dependerá en gran medida de que haya un mercado de consumo fiable para los productores. Aquí, el sector automovilístico está muy bien posicionado, ya que actualmente consume el 17% del acero en la Unión Europea.

El Llamado a la Acción para Fabricantes de Automóviles

T&E ha pedido a los legisladores europeos que ayuden a crear un mercado líder para el acero ecológico en Europa, estableciendo objetivos para que los fabricantes de automóviles utilicen una cantidad cada vez mayor de este material en los automóviles nuevos a partir de 2030.

Según el informe, Europa podrá producir hasta 172 toneladas métricas ™ de acero con bajo contenido de carbono al año en 2030, más que suficiente para satisfacer la demanda total de acero del sector de la automoción, que consumió 36 tm en 2022. Además, un cambio hacia el aligeramiento reducirá el uso de acero en el sector del automóvil en la próxima década.

T&E afirma que se debería exigir que al menos el 40% del acero de los automóviles nuevos sea ecológico para 2030, y que el porcentaje aumente al 75% en 2035 y al 100% en 2040. Los fabricantes de automóviles deberían tener un objetivo promedio que se pueda cumplir en todos sus automóviles nuevos, lo que les permitiría absorber el coste inicial a través de modelos premium.

En conclusión, el sector automovilístico está bien posicionado para ser un mercado líder de acero ecológico en Europa, y la adopción de objetivos ambiciosos para el uso de este material puede ser un factor clave para reducir significativamente las emisiones de CO2 de la producción de automóviles.