La industria inmobiliaria española ha sido testigo de un cambio significativo en la demanda de segunda residencia durante el 2024. Según el ‘Perfil del Demandante de Segunda Residencia’ realizado por Fotocasa Research, el porcentaje de esta demanda ha experimentado una caída de dos puntos porcentuales, situándose en el 10% del total de la demanda de vivienda, en comparación con el 12% registrado en 2023 y el 11% de los años 2021 y 2022.
Este descenso en la demanda de segunda residencia se produce después de tres años consecutivos al alza, impulsados por el aumento del interés durante la pandemia. Sin embargo, este fenómeno parece haber llegado a su fin, y los compradores ahora se enfocan en la búsqueda de una mejor calidad de vida en todos los sentidos, lo que ha moderado el dinamismo del mercado de segundas residencias.
El Perfil del Comprador de Segunda Residencia
El retrato del demandante de segunda residencia en España presenta algunas características interesantes. En cuanto al género, el perfil está levemente masculinizado, con un 53% de hombres y un 47% de mujeres, una diferencia que se ha ido acortando en los últimos años.
En lo que respecta a la edad, la media de los demandantes se sitúa en los 42 años, un año menos que en 2023 y uno más que en 2022. Sin embargo, el grupo más numeroso lo forman los mayores de 55 años, con una presencia del 25%. Además, se observa una diferencia importante entre los compradores y los arrendatarios, siendo los primeros de una edad media más avanzada (46 años) en comparación con los segundos (38 años).
La Compra versus el Alquiler de Segunda Residencia
Una de las principales tendencias observadas en el mercado de segunda residencia es el cambio en la proporción entre compra y alquiler. Mientras que en 2023 la diferencia entre ambos se había estrechado, con un 54% de compradores y un 46% de arrendatarios, en 2024 esta brecha se ha ampliado nuevamente, alcanzando el 59% de compradores y el 41% de arrendatarios.
Este alejamiento de la proporción entre compra y alquiler revierte la tendencia de los años anteriores, que había alcanzado su punto más bajo en 2020, con un 40% de compra frente al 60% de alquiler. A partir de 2021, el alquiler comenzó a perder prevalencia, dando paso a un aumento progresivo de la compra de segunda residencia.
Otra diferencia clave entre ambos grupos de demandantes se encuentra en la propiedad de la vivienda principal. El 85% de quienes demandan una segunda residencia para comprar ya son propietarios de su vivienda principal, mientras que este porcentaje se reduce al 63% entre los demandantes de alquiler. Sin embargo, estas cifras se encuentran más próximas entre sí que en el estudio anterior, donde la diferencia era más amplia.
Por todo esto, el análisis del ‘Perfil del Demandante de Segunda Residencia‘ refleja una caída en la demanda de este tipo de vivienda, así como un cambio en las preferencias de los compradores, quienes ahora se enfocan más en la búsqueda de una mejor calidad de vida. Además, se observa una mayor tendencia hacia la compra de segunda residencia, con un perfil de comprador que se diferencia del arrendatario en cuanto a edad y situación patrimonial.