En un momento crucial, la Comunidad de Madrid se encuentra ante el desafío de gestionar la llegada de menores extranjeros no acompañados. El consejero de Presidencia, Justicia y Administración, Miguel Ángel García, ha denunciado que el Gobierno central busca «lavar su falta de gestión» y el «caos migratorio» al que ha sometido a España, convocando una Conferencia Sectorial para abordar el reparto de estos menores entre las distintas comunidades autónomas.
La Comunidad de Madrid Asumiendo un Mayor Peso
Según las declaraciones del consejero, en la Conferencia Sectorial que se celebrará esta tarde, a la Comunidad de Madrid le corresponderán 30 menores de este reparto. Sin embargo, García ha señalado que en lo que llevamos de año, Madrid ha atendido ya a 1.239 menores extranjeros no acompañados. Esto evidencia que la Comunidad de Madrid está asumiendo un peso mucho mayor en la atención a esta población vulnerable, en comparación con lo que el Gobierno central pretende distribuir.
El Gobierno Central Evade sus Responsabilidades
El consejero ha criticado duramente la actitud del Gobierno de Pedro Sánchez, afirmando que «es fácil pedirle a otra administración propuestas cuando eres tú el que tiene las competencias«. García Martín ha recordado que las competencias en materia de inmigración corresponden al Gobierno central, y que «como consecuencia de que no está ejerciendo esas competencias, ahora las distintas comunidades autónomas y los distintos ayuntamientos nos vemos en este problema».
La Necesidad de una Respuesta Integral y Efectiva
Ante esta situación, el consejero ha reclamado al Ejecutivo central que haga «su trabajo«, que se ponga «a la tarea» y a «gestionar» el reto de la inmigración. García Martín ha sido contundente al afirmar que «lo único que sabe hacer este Gobierno es dispersar los problemas, aquellos problemas que él ha creado y que no es capaz de solucionar».
Según el consejero, el Gobierno de Pedro Sánchez está «más ocupado de poder mantener el propio empleo del presidente» que de hacer frente al «caos migratorio» que se ha convertido en «la vergüenza de toda la Unión Europea».
En resumen, la Comunidad de Madrid se enfrenta a un reto significativo al tener que asumir una mayor carga en la atención a menores extranjeros no acompañados, mientras que el Gobierno central parece evadir sus responsabilidades y dejar a las comunidades autónomas y municipios lidiar con un problema que es de ámbito nacional.
Ante esta situación, se hace evidente la necesidad de una respuesta integral y efectiva por parte del Gobierno, en la que se asuman plenamente las competencias y se desarrollen estrategias de gestión adecuadas para abordar este desafío humanitario.
