Un estudio reciente en el que participó la Universidad de Alcalá (UAH) ha revelado el impacto del cambio climático en los bosques del hemisferio norte, destacando cómo las especies arbóreas están aumentando su abundancia en los límites más fríos y húmedos de su distribución.
El desplazamiento de especies forestales y factores influyentes
Las previsiones señalan que el cambio climático desplazará las especies forestales templadas hacia zonas más frías y húmedas. Hasta ahora, estas evidencias se basaban en modelos teóricos u observaciones locales, con resultados a veces contradictorios. Diversas hipótesis plantean que las temperaturas actuales podrían no ser suficientemente altas para forzar un desplazamiento latitudinal de estas especies, mientras que otras consideran que la actividad humana en los bosques (como cambios en el uso del suelo como el abandono del pastoreo) tiene un impacto significativo en estos desplazamientos.
Las evidencias cuantitativas del cambio en la abundancia
El estudio liderado por investigadores de la UAH y publicado en la revista científica ‘Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS)’ proporciona por primera vez evidencias cuantitativas de un cambio en la abundancia de las especies forestales templadas, mostrando un incremento significativo en las regiones más frías y húmedas a nivel continental.
A pesar de la influencia de las actividades humanas, los análisis demuestran un aumento neto de la abundancia hacia las zonas menos cálidas y áridas. Aunque la disponibilidad de agua se ve afectada por el cambio climático, los árboles han incrementado su tamaño en promedio en las últimas décadas, debido a diversos factores como cambios en la gestión forestal, aumentos en la duración del periodo vegetativo y la fertilización de carbono.
Las consecuencias para la gestión forestal y conservación
La información obtenida sobre la adaptación de las especies forestales al cambio climático es crucial para definir los planes de conservación, gestión y restauración de ecosistemas. Se sugiere que algunas especies actualmente utilizadas para la restauración en Europa podrían no ser aptas en un futuro cercano, lo que lleva a replantear los programas de reforestación masiva como solución para el secuestro de carbono a largo plazo.
Investigaciones a largo plazo y a gran escala son fundamentales para confirmar o refutar las predicciones de los modelos y proporcionar información realista para la toma de decisiones. Este estudio, realizado por un consorcio internacional que incluye a la UAH, la Universidad de Lund y la Universidad de Birmingham, entre otras, analizó datos de más de dos millones de árboles de 73 especies en Europa y Estados Unidos.
La financiación y el alcance del estudio
El estudio fue financiado a través del proyecto LARGE («Combinando inventarios y trabajo de campo para identificar las causas y consecuencias de los puntos calientes de cambio climático») del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y el proyecto TreeMort del Consejo Europeo de Investigación (ERC). Participaron investigadores de 12 países y se analizaron más de 125.000 parcelas en Europa y Norteamérica en un esfuerzo sin precedentes.
Con esta investigación, se arroja luz sobre cómo el cambio climático está afectando a los bosques del hemisferio norte y las implicaciones que tiene para la gestión forestal y la conservación de la diversidad biológica en un contexto de cambio climático acelerado. La evidencia cuantitativa presentada en este estudio ofrece una base sólida para la toma de decisiones informadas sobre la preservación de nuestros ecosistemas forestales en un mundo en constante cambio.