El Juzgado de lo Penal número 1 de Murcia ha desestimado la denuncia de una adolescente de 13 años de edad contra su madre y su padrastro, a los que acusaba de malos tratos. El magistrado considera que no resulta «creíble» y le obliga a realizar las tareas del hogar.
La chica acusaba a su madre de haberle tirado del pelo y a su padre de darle una patada tras una discusión por no colaborar en las tareas de casa y hacer los deberes. Sin embargo, el juez considera que las pruebas no constatan los hechos denunciados, pero sí que tiene «un interés muy claro por dejar de ser controlada».
Según la sentencia a la que ha tenido acceso ‘La Vanguardia’, el magistrado sostiene, sin embargo, que «se ha probado que la denunciante está en una edad difícil, no colabora -como es su obligación- en las tareas de casa, ni obedece y respeta a sus padres, como es igualmente su deber, no soportando las críticas que por su indebido comportamiento le dirigen su madre y la pareja de ésta».
Defiende que «los hijos deben contribuir, equitativamente, según sus posibilidades, al levantamiento de las cargas de la familia» y «si esta obligación no se cumple, es lógico que los padres se enfaden y estén molestos con su hija».
Eso sí, considera que «de ahí a que la golpeen y la maltraten va un trecho».