El mercado laboral ha sufrido un notable cambio en los últimos años gracias al diseño moderno de oficinas que busca la comodidad del trabajador creando entornos cómodos y amigables. Por ello, a la hora del diseño y la instalación de las oficinas las compañías deben cuidar todos los detalles como evitar la contaminación acústica y reducir molestias a sus empleados. Y es que para garantizar el acondicionamiento acústico y reducir el ruido los fabricantes diseñan paneles acústicos como una solución efectiva para minimizar el impacto ambiental.
¿Qué son los paneles acústicos y cómo funcionan?
Los paneles acústicos son materiales absorbentes de ruido y que evitan la reverberación de las ondas sonoras, por ello, existen diferentes materiales y formas que se pueden adoptar en cualquier oficina e instalación. Ideatec, una compañía líder en el mercado de los paneles acústicos ofrece una amplia gama de materiales para implementar en el lugar de trabajo.
Según la legislación española se entiende como ruido molesto toda generación auditiva que supere los 65 decibelios por el día y por la noche los 55. La calidad de un lugar se puede medir por la ausencia de ruido, por ello, los paneles acústicos se usan en lugares para reducir el foco auditivo en las zonas donde se coloquen.
Los paneles acústicos pueden ser modulares o móviles y están fabricados en materiales como la madera, el acero galvanizado, la espuma, textiles o de lamas. También existen superficies difusoras que se pueden colocar en paredes, techos, suelos y demás superficies.
Lo bueno de los paneles acústicos es que son fáciles de colocar, son ligeros y apenas requieren mantenimiento ni atención.
Los paneles acústicos funcionan usando el poder de absorción del ruido según el material y la colocación del panel. Al igual que en determinadas superficies la acústica de un lugar varía según la colocación, dispersión y ubicación de muebles, paredes y demás elementos lo mismo sucede con el aislamiento.
¿Cuáles son los usos de los paneles acústicos y dónde se pueden colocar?
Lo bueno de los paneles de reducción de ruido es que se pueden colocar en cualquier entorno y superficie de trabajo. Esto es posible gracias a la modularidad de los paneles o la posibilidad de combinar con difusores y otras soluciones a medida como los paneles plegables o correderos.
Da igual que el entorno sea grande o pequeño los paneles se adaptan a la perfección con la atmósfera y superficie del lugar. Además, no solo ejercen como reductor del impacto ambiental del ruido, sino como un elemento estético y decorativo que le da un valor añadido y presencia a la estancia.
Y es que, por ejemplo, existen paneles decorativos de tela que ofrecen un toque diferente al lugar y se pueden combinar con cuadros u otros materiales para renovar la oficina. Por si fuera poco, los paneles pueden ir acompañados de materiales reductores como la madera presente en algunos difusores y complementos lo que permite su colocación en cualquier estancia por grande o pequeña que esta sea.
La colocación en salas de reuniones grandes y pequeñas es posible cubriendo las paredes con difusores tanto en el interior como el exterior o bien dividiendo el espacio con mamparas y tabiques móviles que apenas requieren obra y mucho menos mantenimiento.
Finalmente, los paneles se pueden colocar tanto en zonas comunes (salas de reunión, cafetería, despachos colectivos) como en sitios más privados como despachos, baños y recepción. De esta forma, se puede aislar y focalizar el ruido y colocar en las zonas donde es realmente necesario.