La Audiencia de Lleida ha condenado a los padres de Nadia por un delito continuado de estafa que alcanzó los 400.000 euros.
Para el padre, Francisco Blanco, ha dictado 5 años de cárcel; y para la madre, Margarita Garau, 3 años y 6 meses de prisión.
Según la sentencia, ambos progenitores aprovecharon la enfermedad de la menor, afectada de tricotiosdistrofia, para enriquecerse de forma ilícita.
El tribunal ha condenado además a los progenitores a pagar multas por valor de 5.000 euros y a devolver el dinero que recaudaron, al haber embaucado a miles de personas en campañas solidarias que supuestamente recaudaban fondos para curar a su hija Nadia.
La resolución no es firme y cabe recurso de apelación. El abogado de Margarita Garau, Alberto Martín, ha asegurado en ‘Espejo Público’ que considera excesiva la condena para su clienta y que recurrirán.