Durante el verano, es fundamental prestar atención a la protección de nuestra piel contra los dañinos efectos del sol. Sin embargo, existe un ingrediente clave que puede brindarnos una protección adicional: el retinol. Muchas personas temen utilizar el retinol en verano, creyendo que puede sensibilizar la piel, pero en realidad, este activo puede ser un gran aliado para protegernos del sol y cuidar nuestra piel.
El Retinol: Más Que un Antiedad
El retinol no solo es el mejor ingrediente antiedad, sino que también tiene la capacidad de proteger la piel durante el verano gracias a su poder renovador. Estefanía Nieto, directora dermocosmética de Medik8, aclara que «el retinol no solo es el mejor ingrediente antiedad, además es un gran aliado para proteger la piel en verano por su poder renovador».
De hecho, Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Perricone MD, subraya que «igual que a nadie se le pasaría por la cabeza interrumpir un tratamiento con antibiótico en medio de un resfriado fuerte, tampoco deberíamos plantearnos dejar los retinoides en verano».
La razón de esto, según Sonia Ferreiro, biotecnóloga y cosmetóloga en Byoode, es que la piel ya estará acostumbrada a este activo, y dejarlo supone retroceder en todo el camino recorrido. Dos meses sin retinol en la piel suponen perder todos los beneficios que se han adquirido durante todo el tratamiento. Además, el retinol posee acción antioxidante y evita algunas de las consecuencias nocivas del sol, tal como explica la cosmetóloga.
Beneficios del Retinol en Verano
Uno de los principales beneficios del retinol en verano es que «estimula la actividad de la enzima P53, que es la encargada de proteger el ADN celular de la piel», según Estefanía Nieto. Esto evita la degradación celular y facilita su regeneración tras la exposición solar, convirtiéndolo en un gran aliado para la piel después de haber tomado el sol, por su efecto calmante aftersun, como señala Isabel Reverte, directora dermocosmética en Ambari.
Sin embargo, a diferencia de la vitamina C, el retinol es fotosensible, lo que significa que el sol puede hacer que sea menos efectivo. No obstante, Marta Agustí, directora dermocosmética de Boutiour, aclara que «eso no significa que sea fotosensibilizante, no vuelve la piel más sensible ante el sol». Además, existen retinoides de nueva generación que sí permiten el uso diurno.
En conclusión, el verano es una época perfecta para retinizar la piel porque suele estar más fuerte y con la función barrera más resistente, además de que somos más constantes con la aplicación del SPF, un requisito fundamental para usar retinoides, tal como nos explica Mireia Fernández, directora dermocosmética de Omorovicza.
