El ritmo de vida que llevamos nos predispone a enfrentar problemas de sueño y altos niveles de estrés. Estos factores han exacerbado un problema estético común: las bolsas y ojeras. La piel alrededor de los ojos, siendo tan fina y sensible, es la primera en mostrar los efectos del cansancio, la mala alimentación y la falta de hidratación. Aunque es crucial identificar el origen de las ojeras, existen remedios caseros que pueden ayudar a mejorar su apariencia. Aquí te presentamos cinco opciones: aplicación de frío, pepino, bolsas de manzanilla, tomate y aceite de almendras. En esta entrada, profundizaremos en tres de estos efectivos métodos.
1Aplicación de frío: un alivio instantáneo para las ojeras
Uno de los remedios más habituales y efectivos para reducir la inflamación de los ojos es la aplicación de frío. El frío actúa como un vasoconstrictor, reduciendo la hinchazón y mejorando la apariencia de la zona ocular. Para este remedio, simplemente coloca dos cucharas de postre en el congelador durante unos minutos. Una vez estén frías, aplícalas sobre los párpados. La sensación refrescante no solo disminuirá la inflamación, sino que también proporcionará un alivio inmediato al cansancio ocular.