Just Eat desde hace años ha insistido en la necesidad de que se cumpla la ley rider para que la competencia entre las empresas de reparto sea más justa. Pero ahora, aprovechando las elecciones europeas del próximo domingo 9 de junio, los repartidores de París han pedido a los candidatos de todos los partidos en su país que apliquen las protecciones necesarias a los repartidores. Es un documento que en dos páginas hace 10 peticiones, y pide ser firmado por todos los candidatos al congreso europeo.
«Protección de los derechos de los trabajadores: Estoy comprometido a defender y promover políticas que permitan la protección y mejora de las leyes laborales. Garantizando así condiciones óptimas de trabajo, acceso a la protección social, salarios reales que permitan vivir y no sobrevivir», se lee en el primer punto del documento, que bien puede ser el más importante del texto. Más adelante, en el texto se pide que no se permita la «Uberización» de las empresas en el país, y la protección a los trabajadores indocumentados, un punto clave que se repite tanto en Francia como en Europa como en otros países donde hay situaciones parecidas.
«Me comprometo a defender los derechos de los trabajadores indocumentados y a trabajar por la creación de canales legales que permitan su regularización, reconociendo su contribución a nuestras sociedades y su derecho a condiciones de trabajo dignas», explica también el texto que se pide que firmen a los candidatos a las elecciones europeas.
Tiene sentido que Francia sea el país donde los repartidores ponen más presión sobre los gobernantes. La nación gala fue, junto a Alemania, una de las que más protestó en contra del ‘Reglamento Europeo de Trabajo en Plataformas’ y que no solo retrasó varias veces la votación, sino que consiguió que la ley tuviera cierta flexibilidad para las diferentes naciones que forman parte de la Unión Europea. Por tanto, tiene sentido que este haya sido el país en el que se haya empezado a hacer presión desde el punto de vista de los trabajadores.
Se suma a que no es especialmente complicado encender la opinión pública francesa. La realidad es que en el país ya ha habido varias protestas por la ‘uberización’ de puestos de trabajo, por lo que tiene sentido que sea uno de los países que se organizan primero a la hora de entregar una petición de este tipo a sus candidatos, y por los que sea uno donde a pesar de las opiniones de Emmanuel Macron sea más viable organizar a los repartidores contratados.
JUST EAT Y LA CONTRATACIÓN QUE HACEN RUIDO A LA COMPETENCIA
Tampoco parece extraño que Just Eat sea la que presiona en este sentido. Mientras que Delivery Hero, la matriz de Glovo, insiste en la inviabilidad de contratar a sus repartidores y Uber Eats parece ignorar la situación el tiempo posible, la tercera empresa de reparto a domicilio de España tiene a su plantilla contratada lo que les da una ventaja de cara a la nueva ley, y que explique el interés tanto de la directiva como de los trabajadores en que se cumpla la nueva ley.
Por otro lado, para los trabajadores es además una forma de poner presión en su empresa. En París, justo el año en que los juegos olímpicos prometen aumentar el movimiento de pedidos en la ciudad, la empresa anunció que dejaría de funcionar con flota. El motivo, como lo han expresado otras empresas, es que competir en diferencia de condiciones hace que sea demasiado difícil mantener en la mira a Glovo y a Uber Eats, ya ha pasado en el resto del país galo, donde cedieron las operaciones a Stuart, y ahora repetirán estrategia en la capital.
Es una decisión que se ha ganado las críticas de las organizaciones de riders tanto en Francia como en el resto de Europa. Es que hasta ese momento uno de los puntos que la empresa defendía era la necesidad de contratar a los repartidores no solo por un motivo de negocio, sino también para evitar la precarización del sector.
ESCAPAR DE LA PRECARIZACIÓN DEL REPARTO
«Lucha contra la precarización laboral: Me comprometo a tomar medidas concretas para luchar contra la precarización laboral fomentando la creación de empleos estables y duraderos, así como la implementación una seguridad social sólida para proteger a los trabajadores», se lee en el cuarto punto del documento entregado a los candidatos, en la práctica esta es la principal exigencia de los trabajadores representados por el sindicato francés ‘Fuerza Obrera’.
El otro es, como no podía ser de otra forma en cualquier trabajo digital en 2024, es la protección de datos. «Me comprometo, por todos los medios a mi alcance, a garantizar la no utilización de los datos personales de los trabajadores generados o no durante su actividad profesional con fines comerciales, o de reorganización del trabajo, que permitan un deterioro de las condiciones laborales», sentencia el documento.