El colesterol es una enfermedad que afecta a millones de personas alrededor del mundo, la cual impacta directamente el día a día de todos ellos. Por su parte, padecer un nivel alto puede afectar al corazón y los vasos sanguíneos, aumentando el riesgo de desarrollar enfermedad cardiovascular. Es por eso que los médicos recomiendan una serie de tareas para evitar un desenlace fatal, y allí es cuando aparece la actividad física.
Puntualmente nos centraremos en caminar, algo que incluso es muy bueno para la salud sin la necesidad de estar enfermos para hacerlo. Lo bueno de esto es además que no se requiere pagar una mensualidad en un gimnasio o perder demasiado tiempo: Con solo brindarle 25 minutos diarios de forma ininterrumpida, bastará para que el colesterol comience a bajar poco a poco.
¿Por qué el colesterol puede encontrarse de esta manera?
La ciencia explica que la actividad física regular y constante puede ayudar a aumentar los niveles de colesterol bueno y disminuir los niveles del malo, ¿Pero qué significa esto? El colesterol de lipoproteínas de alta densidad (HDL) es conocido como el «bueno» porque ayuda a eliminar otras formas del torrente sanguíneo. Los niveles más altos están asociados con un menor riesgo de desarrollar una enfermedad cardíaca.
De todas formas, esto no es lo único que tendrás que hacer en caso de sufrir de colesterol alto. Lo más importante de todo es que acudas regularmente a tu médico personal, el cual hasta puede darte una medicación en particular. Luego hay una dieta especial que deberás seguir, ya que hay varios alimentos que son propensos a aumentar estos niveles, algo que el propio doctor sabrá decirte.
Otros beneficios de caminar, más allá de bajar el colesterol
Caminar es algo tan sencillo y que otorga tantos beneficios que sería una pena que no lo hagas. Y no nos referimos de algo ocasional, sino a que verdaderamente te tomes el debido tiempo para realizarlo correctamente. Esto también te ayudará a controlar los niveles de azúcar en sangre, caminando unos 50 minutos diarios. La actividad física ayuda al cuerpo a procesar la glucosa de manera más eficiente, lo que puede ser beneficioso para gente con diabetes tipo 2 o en riesgo de desarrollarla.
Por último y más allá del colesterol, salir a caminar puede ayudar a reducir el estrés, la ansiedad y la depresión, y mejorar el estado de ánimo en general. La liberación de endorfinas durante la actividad física puede tener efectos positivos en la salud mental, siendo que dejarás en dicho ejercicio mucha tensión en vez de guardarla dentro tuyo, ¿Qué estás esperando para empezar?