El mundo necesita una vacuna contra el VIH para poder vencer al virus que todavía infecta a más de un millón de personas cada año y contribuye a cientos de miles de muertes.
A pesar de 20 años de fracasos en los principales ensayos clínicos de vacunas contra el VIH (cuatro de ellos sólo en esta década), investigadores afirman que recientes avances científicos les pondrán, con suerte, en camino para desarrollar una vacuna altamente eficaz contra el virus.
LA VACUNA DA UN NUEVO PASO CONTRA EL VIH
Sin embargo, las autoridades sanitarias aún carecen de una vacuna eficaz y aprobada que induzca anticuerpos ampliamente neutralizantes, capaces de neutralizar las cepas circulantes más comunes del VIH, recuerda un resumen del grupo Science.
Una de las soluciones consiste en un proceso denominado selección de la línea germinal, en el que los investigadores utilizan una serie de proteínas dirigidas por el sistema inmunitario (inmunógenos) para guiar y ‘preparar’ a los linfocitos B jóvenes a medida que maduran en lugares denominados centros germinales.
Pero probablemente no será hasta la década de 2030. «Una vacuna eficaz es realmente la única forma de proveer inmunidad a largo plazo contra el VIH, y eso es lo que necesitamos”, declararon el lunes en la Conferencia sobre Retrovirus e Infecciones Oportunistas de Denver.
Lo hizo Dra. Julie McElrath, directora de la división de vacunas y enfermedades infecciosas del Centro Oncológico Fred Hutchinson, de Seattle.
Ahora, los científicos elogian la alta calidad técnica de estos estudios, uno de los cuales ha alcanzado ya la fase de ensayos clínicos, aunque recuerdan que en su mayor parte se han realizado en animales, por lo que sus resultados no necesariamente pueden ser trasladados a humanos.
EL VIH, UN AGENTE CASUAL DEL SIDA
El VIH fue identificado como agente causal del sida en 1983. Desde entonces se han invertido miles de millones de dólares en investigación sin que se haya logrado una vacuna preventiva eficaz.
En concreto, mientras el virus del VIH se desliza fuera de una célula humana para acoplarse y posiblemente inyectar su dañina carga de código genético, hay un momento espectacularmente breve en el que una pequeña parte de su superficie se abre para comenzar el proceso de infección. V
er esa estructura abrirse y cerrarse en apenas una millonésima de segundo les está dando a los investigadores un nuevo control sobre la superficie del virus que podría conducir a anticuerpos ampliamente neutralizantes para una vacuna contra el VIH.
UN NUEVO CONTROL PODRÍA CONDUCIR A ANTICUERPOS NEUTRALIZANTES
La dificultad estriba en que «la estructura de la envuelta del VIH que la hace muy poco accesible a la acción de los anticuerpos neutralizantes”, como explica el virólogo José Alcamí, director de la Unidad de Inmunopatología del SIDA (Instituto de Salud Carlos III).
Estos cuatro artículos (dos en la revista Science, uno en Science Immunology y otro en Science Translational Medicine) exponen avances en una estrategia secuencial de vacunación para obtener una vacuna eficaz frente al virus VIH. Los autores de los estudios publicados del Instituto Scripps y de la Universidad de Harvard (EEUU), «guían al sistema inmunitario para generar un tipo específico de anticuerpos neutralizantes con diferentes inmunógenos».
«Los estudios son de muy alta calidad e importantes para el desarrollo de vacunas eficaces frente al VIH», resalta el jefe del grupo de Poxvirus y Vacunas en el Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC). Reconoce las «limitaciones” al tratarse de “ensayos preclínicos en modelos animales», pero cree que abren “una luz de esperanza hacia el entendimiento de cómo atacar mejor al VIH».
CADA AÑO HAY NUEVOS DESCUBRIMIENTOS, PERO SIN RESULTADOS
El desarrollo de una vacuna contra el VIH salvaría millones de vidas. Sin embargo, los investigadores aún no han descubierto una vacuna eficaz contra el virus. En 2009, un estudio publicado en el Journal of Virology encontró que una vacuna experimental previno alrededor del 31% de los nuevos casos. Otras investigaciones se detuvieron debido a riesgos peligrosos.
A principios de 2013, el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas detuvo un ensayo clínico en el que se probaban inyecciones de la vacuna HVTN 505. Los datos del ensayo indicaron que la vacuna no prevenía la transmisión del virus ni reducía la cantidad de VIH en la sangre.
En todo el mundo se desarrollan actualmente investigaciones sobre vacunas. Cada año hay nuevos descubrimientos. En 2019, los investigadores de la Universidad de Pittsburgh anunciaron que habían desarrollado un tratamiento prometedor que les permitía:
- Diseñar ciertas células del sistema inmunitario para reactivar el VIH en células que contienen VIH inactivo o latente.
- Usar otro conjunto de células del sistema inmunitario diseñadas para atacar y eliminar células con VIH reactivado.
Aunque no han habido resultados completamente claros, sus hallazgos podrían proporcionar la base para una vacuna contra el VIH; los ensayos clínicos ya están en desarrollo.