En los tiempos que corren, ahora la gente suele buscar el amor en Tinder, que no es otra cosa que una aplicación móvil de citas. Esto es sin dudas algo muy diferente a lo que sucedía en tiempos anteriores, en donde se solían conocer las parejas en una discoteca, bar o a través de conocidos. De todas formas nada de malo tiene esto, que es algo que te permite en la comodidad de tu casa interactuar con otros.
Al igual que Badoo u otras plataformas de citas, Tinder está bien instalado en gran parte del planeta siendo acaso la más popular de todas. Es normal que se use en las grandes o pequeñas ciudades, pero lo inusual fue algo que pasó en la Antártida, un continente inhóspito en el cual prácticamente nadie vive, ya que las bajas temperaturas hacen la vida extremadamente complicada de llevar.
El primer match de Tinder en la historia de la Antártida, ¡Viva el amor!
¿Cómo puede ser posible que en un sitio así puedan haber dos personas que se unieron a través de Tinder? Bueno, hace pocos meses un científico estadounidense se encontró con una mujer que se encontraba acampando en el frío continente, a 45 minutos de distancia ¡en helicóptero! de la estación base de McMurdo. Sí, parece el inicio de una película de Hollywood en donde Adam Sandler sería el protagonista.
Esto pasó en una de las solitarias noches del científico, quien contó estar acostado en su cama aburrido cuando se le ocurrió entrar a Tinder. El hombre llevaba solo unos meses utilizando la aplicación móvil de citas en Estados Unidos y quería ver si había alguna mujer buscando compañía a miles de kilómetros de su casa, por lo que cambió la localización preferida y se puso mano a la obra.
Tinder salvó a dos personas y el amor hizo lo suyo
Si bien no le resultó sencillo, terminó encontrando al gran amor de ese lugar. Una divertida particularidad es que el científico pidió no ser nombrado por miedo a que el gobierno le quite sus privilegios de Internet, si es que alguien descubría que estaba usando la preciada banda ancha para buscar citas. Una verdadera locura pensar todo lo que Tinder puede hacer, ¿No?
Si bien la aplicación no lleva estadísticas sobre sus usuarios en la Antártida, la empresa coincidió en que probablemente se trataba del primer match en el continente. Cabe mencionar que al día de hoy se ven pero no muy a menudo, ya que sus trabajos los mantienen alejados en gran parte del tiempo y el amor está en pausa. De todas formas, puede ser una muy divertida anécdota para sus hijos el día de mañana.
