Café de especialidad, la tercera ola del café

Una de las bebidas más aceptadas, aclamadas y consumidas en el mundo es el café. Durante siglos se ha convertido en el pilar perfecto de una alimentación equilibrada y sana que mantiene sus perfectas cualidades gustativas. Tanto nuestro organismo como nuestro paladar se ven beneficiados por todas las propiedades que nos ofrece, desde ser un potente estimulante y antioxidante, hasta el cuidado del corazón, sin olvidar la dosis de energía extra que aporta con todo su sabor.

Sin embargo, no todos los cafés son iguales ni tampoco la forma de percibir su consumo. A lo largo de los años, esta deliciosa bebida ha ido evolucionando según las necesidades y gustos de una sociedad siempre cambiante. Es así como, en la actualidad, hemos llegado a la tercera ola, un momento donde el objetivo principal es comprar café de especialidad. Pero ¿sabes a qué se debe y cuál ha sido esa evolución?

Las tres olas del café desde sus inicios

Aunque podríamos extendernos para conocer la evolución del café y las características distintivas que separan cada una de estas fases, un breve resumen será suficiente para viajar por estos más de dos siglos de continuas olas cafeteras.

Primera ola (1800-1970)

Durante el siglo XIX y hasta bien entrado el XX, fue el momento en el que el café se extendió por todo el mundo, haciéndose accesible a cualquier consumidor. En la década de los 60 del pasado siglo, fue el momento más álgido de su expansión, ya que su popularidad aumentó de forma imparable. Esto fue debido a los avances tecnológicos que consiguieron comercializar las primeras cafeteras domésticas.

Segunda ola (1970-2000)

Esta segunda etapa se centró en la calidad del café y en su forma de preparación. Es así como surgen nuevos ingredientes que se añaden al café clásico, y distintas empresas se erigen como negocios internacionales, expertos en diferentes especialidades. Más que una bebida preparada en casa y para disfrutar en la intimidad, se extiende hasta la calle y se convierte en un evento social.

Tercera ola (2000-actualidad)

Tras estos dos periodos de conocimiento y accesibilidad, ha llegado un tercero que se centra, básicamente, en la forma en la que tomamos y elegimos el café. El consumidor necesita ser consciente de todo el proceso ético que acompaña a cada taza, desde su lugar de origen, tratamiento con los productores y trabajadores, así como el procedimiento en su elaboración. El café deja de ser una simple bebida para convertirse en toda una experiencia moral que va más allá del país de origen o especialidad.

Los consumidores, además de saborear un buen café, necesitan dar prioridad a las prácticas sostenibles que le acompañan. Ya no se conforman con buscar granos más naturales y saludables, también priorizan el respeto en todas las etapas, especialmente a los seres humanos que participan, con su trabajo, en este proceso.

De esta nueva toma de conciencia nace el que conocemos como café de especialidad, aquel que ofrece una calidad distintiva que explosiona en el paladar, pero también añade una comunicación perfecta con el consumidor, que es consciente de los beneficios que aporta a todos los componentes de la cadena de suministro.