La comida que ingerimos, ya sea en el almuerzo o la cena, a veces puede ser insuficiente, por lo que consumir postres siempre es una buena alternativa a la hora de silenciar a nuestra panza. Incluso muchas veces estamos satisfechos, pero tenemos esas necesidad de degustar algo dulce y agradable al paladar. Puede ser frío o caliente, pero esa sensación es indescriptible.
Ahora bien, la culpa suele jugar un rol importante en la elección que hacemos. Engordar puede ser un factor y optamos por una fruta, desconociendo que existen postres dulces bajos en calorías, que nos permitirán conocer placeres sin culpas. Para ello, más allá de tener un conocimiento básico de cocina, necesitamos utensilios adecuados para prepararlos y una billetera acorde a nuestro gusto.
Postres bajos en calorías, ¿A partir de cuántas?
Hay que tener en cuenta que el postre viene después de un plato principal, por lo que se debe hacer un equilibrio para no vernos abrumados con tanta comida. Para considerar una receta baja en calorías, el plato debe aportar una energía igual o menor a 200 kcal. Las frutas pueden jugar un papel importante aquí, tanto para darle un toque especial con ralladuras, trozos pequeños o cáscaras.
Como mencionábamos antes, hay variantes para servir en frío o calientes, y a continuación te daremos algunas alternativas. Una de ellas es la tarda de moras y queso, en donde la porción tiene 100 kcal, ¡Una gran opción! La misma deberá pasar por el horno y puedes usar queso crema bajo en grasas, leche descremada o vegetal, moras en trocitos y un poco de edulcorante.
El chocolate, un gran amigo de los postres dulces bajos en calorías
Las variantes de nuestro amigo el chocolate es infinita, y por supuesto que desde hace tiempo existe la que es baja en calorías. Gracias a ello podemos disfrutas de muchos postres sin culpas, y allí es donde aparece el flan de chocolate. Con apenas 180 calorías por ración, esta receta no tiene ni huevos ni harina, siendo que además puedes evitar el calor sofocante del horno.
El caramelo típico del flan también puede quedar de lado, reemplazándolo con un poco de miel. Este mencionado ingrediente no modificará para nada el resultado final del postre, ya que seguirá teniendo esas consistencia cremosa que lo caracteriza. En solamente 15 minutos estará listo para ser guardado en la nevera, estando listo para ser ingerido unas horas después. Es sencillo: Los postres bajos en calorías están al alcance de la mano.