El Atlético de Madrid quiere volver a pescar en el Real Madrid y Marcos Llorente podría marcar el camino de la operación
Sorpresón el que daba ayer Edu Aguirre en El Chiringuito. El colaborar del programa dirigido por Josep Pedrerol aseguraba en exclusiva que el Atlético de Madrid quería hacerse con los servicios del jugador del Real Madrid, Dani Ceballos, este mismo verano. De ser así, Marcos Llorente podría mostrar el camino para el utrerano.
Según el programa de televisión, el perfil de Dani Ceballos gusta mucho al Cholo Simeone, quien ya se interesó por él en otras ocasiones. Sin embargo, sus actuaciones y renovaciones con el conjunto blanco habrían imposibilitado su llegada al Metropolitano.
Marcos Llorente, Morata, Reguilón…
Si hay algo que caracteriza a la política de fichajes del Atlético de Madrid es que no es nada antimadridista. Desde la secretaría técnica del conjunto colchonero nunca han dudado en lanzarse a por el fichaje de jugadores que previamente hayan militado en el máximo rival de la capital. Los claros ejemplos más recientes son los exitosos Morata, Marcos Llorente y el malogrado Reguilón.
Por ello, que los colchoneros se hayan fijado en Dani Ceballos y quieran hacerse con sus servicios no es cosa de locos. El perfil del jugador del Real Madrid encajaría a la perfección con lo que busca el Cholo Simeone y la falta de minutos en su actual equipo lo convierten en una gran oportunidad de mercado.
Una salida en busca de minutos
Dani Ceballos y el Real Madrid viven en una continua relación de amor-odio. Ambos se quieren, pues llegado el momento siempre acaban renovando. Pero, al mismo tiempo, ambos se «odian», pues la situación no acaba de ser del todo placentera para ambos.
Ahora, esta relación parece que tiene fecha de caducidad. Pese a que ambos están atados hasta el año 2027 un tercer protagonista se quiere entrometer. Y es que, el nuevo, el Atlético de Madrid, llega con promesas de titularidad, minutos e importancia, unos términos que Ceballos solo conoce sobre el papel en el Real Madrid pues sobre el césped se prioriza a otros jugadores, incluso llegados desde la cantera.