El voraz incendio de Valencia, que ha dejado 10 víctimas mortales en el barrio de El Campanar, se originó en un edificio construido por la quebrada empresa catalana FBEX. Sus promociones durante la burbuja inmobiliaria fueron presentadas como un lujo, al alcance muy pocos y con zonas exclusivas. Los materiales eran de primera, con revestimientos de aluminio y «lana de roca», según los archivos que constan en el Colegio de Arquitectos de Valencia.
En teoría, la lana de roca es ignífugo y no se entiende aún cómo pudo arder la fachada y el resto del inmueble en apenas tres horas, una voracidad demasiado elevada para una promoción que utilizaba «materiales de primera calidad».
En un inicio se aseguró que la empresa, tal y como había anunciado, usó material de aluminio del «tipo alucobond». La palabra «tipo» es crucial, puesto que era muy similar. Plancha de aluminio, la supuesta lana de roca y otra plancha del metal, que pasa a estado líquido a más de 830 grados.
IMÁGENES ATROCES EN VALENCIA
No obstante, las imágenes muestran cómo caían trozos fundidos de la propia fachada y se llegaron a ver llamaradas azules en pleno incendio, es decir, un mínimo de 1.000 grados en un edificio moderno y supuestamente equipado para evitar una catástrofe de este estilo.
El caso, bajo secreto de sumario durante al menos un mes, trata de conocer el punto de ignición y también los materiales con los que se construyó el edificio, completamente calcinado. No queda ni una parte del revestimiento para tratar de aclarar lo sucedido.
Además, una de las hipótesis se centra en el efecto chimenea provocado precisamente por esa cubierta de aluminio a escasos centímetros de la pared de ladrillo. La idea era poder ventilar la fachada, pero este hueco actuó como una chimenea, según las declaraciones de arquitectos. Además, existen vídeos en los que se muestran incendios en distintas fachadas y curiosamente, es el de poletileno el que arde de una forma similar que en Valencia, al menos la misma rapidez.
OTRA PROMOCIÓN SIMILAR EN VALENCIA
En Valencia, los residentes de un edificio también construido por Fbex muestra las mismas características en el parque de la Cabecera. Esta promoción también se comercializó como la anterior, velozmente devorada, pero no se ha tomado aún medida alguna. Si bien, sí pudiera facilitar la investigación para conocer el material supuestamente aislante instalado entre las planchas.
«Modernas instalaciones, la máxima calidad de materiales de construcción, acabados y equipamientos con rigurosos controles de calidad durante todo el proceso de edificación», destacaba la promotora en su anuncio.
Otras fuentes, consultadas por este medio, señalan que el problema radica en el revestimiento, conformado por plásticos y polietileno macizo, en concreto al menos de 5 mm de este material entre dos planchas de apenas 0,5 mm de aluminio.
EL REVESTIMIENTO, LA CLAVE DEL INCENDIO EN VALENCIA
Tras el siniestro, la Generalitat de Cataluña busca ahora conocer si existen edificios con polietileno entre planchas de aluminio, no solo en las promociones de Fbex, sino también en el resto en el que se haya utilizado como parte del revestimiento. Y es que, las promociones en Cataluña eran su principal reclamo, de ahí saltó a todo el levante español, desde Castellón a Murcia, pasando por Baleares y Aragón, donde tiene 250 viviendas.
Qué materiales se utilizaron, la clave
Todos los Colegios de Arquitectos están mirando ahora todas y cada una de estas promociones, al tiempo que están constatando que se utilizaron los materiales descritos en los edificios. Y es que, en aquella época había chapuceros que buscaban ahorrarse unos miles de euros para obtener un mayor rendimiento en cada una de las promociones.
Cabe señalar que la cartera de urbanismo en una ciudad corresponde a los Ayuntamientos, no al Ejecutivo autonómico. En Murcia se está mirando, como también en Cataluña con toda la documentación disponible. Asimismo, se estima que el número de edificios diseñados con estos materiales alcanza los 2.000, un número que podría aumentar dado que fue una de las técnicas utilizadas para ahorrar costes debido a su fácil colocación en la fachada, como si de paneles se tratara.
Además, los vecinos de este tipo de inmuebles también muestran preocupación y están realizando una avalancha de consultas para interesarse del estado de sus inmuebles. Por el momento, las aseguradoras en el desastre de Valencia ya han puesto todo de su parte para cubrir a los inquilinos, más de 200 familias.
