El ejercicio cardiovascular, comúnmente conocido como “cardio”, es una parte fundamental de un estilo de vida saludable; sus beneficios son numerosos, ya que, mejora la salud cardiovascular, aumenta la resistencia, ayuda a controlar el peso, reduce el estrés y mejora el estado de ánimo.
Sin embargo, para muchos, el cardio puede ser una experiencia tediosa y aburrida; la monotonía de correr en la cinta o pedalear en una bicicleta estática puede disuadir a las personas de mantener una rutina regular de ejercicio. Descubre cómo puedes hacerlo sin que sea una tortura.
1Encontrar la actividad ideal
El primer paso para disfrutar del cardio es encontrar una actividad que te motive y se ajuste a tus preferencias, la variedad es clave, prueba correr, nadar, bailar, andar en bicicleta, patinar, saltar la cuerda o practicar deportes como fútbol, baloncesto o tenis; experimenta con diferentes opciones hasta encontrar la que te haga sentir bien física y mentalmente.
No te limites a las opciones tradicionales como correr o andar en bicicleta; mantén la búsqueda continua del deporte o actividad física que te guste hasta que logres encontrar uno que te apasione, estas son algunas sugerencias
- Bailes: Zumba, salsa, tango o cualquier otro estilo que te guste.
- Deportes: Natación, fútbol, baloncesto, tenis, artes marciales o cualquier deporte que te divierta.
- Actividades al aire libre: Caminar, senderismo, ciclismo o simplemente jugar en el parque.
- Clases de fitness: HIIT, yoga, kickboxing, meditación, entre otras actividades.