El anuncio de que Bruselas pondrá la lupa sobre la adquisición de Air-Europa por parte de Iberia activó las alarmas de varios medios, pero para la aerolínea no ha sido una sorpresa. Según explican fuentes internas de la empresa, esperaban que una adquisición de este tipo requiriera la atención de Bruselas, por lo que están dispuestos a cooperar, sobre todo por su confianza en que la medida no solo es correcta para la empresa sino para el mercado de las aerolíneas.
«La nota de la Comisión Europea es lo que esperábamos, simplemente señala el paso de la Fase I del proceso a la Fase II. La Comisión señala problemas en ciertas rutas para los que aportamos soluciones en la propuesta de ‘remedies’ que presentaremos, como ya anunciamos, en Fase II», aseguran fuentes de la empresa que entienden las complejidades del proceso.
«Se trata de una propuesta de ‘remedies’ muy ambiciosa que cubrirá todas las necesidades de la competencia. Estamos convencidos de que la operación es buena para los consumidores y buena para España, ya que, entre otras cosas, reforzará el hub de Madrid y fortalecerá la conectividad de nuestro país», sentencian en conversación con el diario Que!. Pero mientras que no ven la revisión de Bruselas como un problema, hay otra crisis que la aerolínea sigue arrastrando.
Se trata de la negociación con los sindicatos de UGT y CCOO por la actual crisis del handling. Las conversaciones entre la aerolínea y los trabajadores del sector se mantienen desde antes del llamado a huelga del pasado fin de semana de reyes y aunque ya se han avanzado propuestas desde ambas partes, aún no se llega a un acuerdo que resuelva el problema y mientras avanza, y se acercan fechas clave como la Semana Santa, pueden volver a correr riesgos.
Para tener una medida del riesgo que representa que se repita la situación que se dio durante el fin de semana de reyes, que no era un puente, se retrasaron casi 20% de los viajes y se cancelaron 444 vuelos. Es un problema que puede ser mucho más complicado de una revisión por parte de la comisión europea para el que se sienten preparados. Si bien se sienten confiados en poder resolver el problema antes de que haya una nueva escalada, de momento, se mantiene una tensa calma entre ambas partes.
Es complicado saber cuando pueden finalmente llegar a un acuerdo. De hecho, el choque ha llamado la atención de ministros y dirigentes políticos por el efecto directo que puede tener sobre los usuarios y sobre las conexiones internacionales y locales del país. No es casual que tanto el ministro de transporte, Óscar Puente, como el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, han insistido en que se debe buscar una solución beneficiosa en los próximos días.
LA COMISIÓN EUROPEA TIENE PREOCUPACIONES A LAS QUE IBERIA ESPERA PODER RESPONDER
Lo cierto es que a pesar de la confianza de la aerolínea, que espera que su propuesta de ‘Remedies’ sea suficiente para superar esta situación. Aun así, el efecto en la competencia y sobre la frecuencia de los viajes puede ser suficiente para, al menos, alargar el proceso más de lo que le gustaría a las dos empresas involucradas.
Según la investigación preliminar de Bruselas, la operación podría disminuir la competencia en el mercado de los servicios de transporte aéreo de pasajeros en varias rutas nacionales, de corta distancia y de larga distancia. La Comisión ha concluido que la operación podría afectar a rutas nacionales españolas, sobre todo a aquellas en las que el tren de alta velocidad no ofrece una alternativa, así como en las rutas entre la España peninsular y las islas Baleares y Canarias.
También advierte de una disminución de la competencia en rutas entre Madrid y algunas de las principales ciudades del Espacio Económico Europeo, y en aquellas que conectan la capital española con destinos como Israel, Marruecos, Reino Unido y Suiza, en las que ambas partes ofrecen una conexión directa. Asimismo, podrían verse afectadas algunas rutas de larga distancia entre Madrid y América del Norte y del Sur, en las que ambas partes ofrecen una conexión directa y se enfrentan a la competencia de solo unos pocos.
Estos son los problemas que tiene que enfrentar la aerolínea en su próxima propuesta de ‘remedies’. De momento no dan demasiados detalles sobre lo que la misma contiene, pero saber los problemas principales que señala la comisión europea apunta al tipo de soluciones por las que la aerolínea puede tener que apostar.
LA LARGA NEGOCIACIÓN POR LA HUELGA DE IBERIA
La empresa lleva ya casi dos meses intentando negociar con los sindicatos para resolver la crisis actual. Es un problema que ha generado un cansancio evidente dentro la empresa, que está en la complicada situación de lidiar con soluciones que desde un principio no han considerado especialmente cómodas.
La aerolínea hizo pública una propuesta que pasa por la creación de una nueva sociedad, participada al 100% por IAG, que absorbería a todos los trabajadores de Iberia Airport Services, exceptuando aquellos que están dentro de la subrogación obligatoria, es decir, que prestan servicios a terceros y pasarán a las nuevas empresas operadoras, aunque estos son «una minoría».
Dentro de esta nueva empresa se pondría en marcha un plan de viabilidad que contempla la baja voluntaria de 1.727, repartidas entre bajas incentivadas para trabajadores de menos de 56 años y prejubilaciones para los mayores, una «petición reiterada de los sindicatos». No obstante, la compañía ha remarcado que estas salidas no supondría una reducción de la plantilla, ya que estos puestos serían repuestos con nuevo personal.
