La consellera de Salud del Govern balear, Manuela García, ha reconocido este miércoles que la sarna es «un problema de salud pública» que resulta «difícil de eliminar y de actuar, sobre todo en determinados sectores».
En un desayuno Socio-Sanitario en Madrid, la consellera ha incidido en que el IbSalut dispone de protocolos y procedimientos de actuación ante la sarna, cuyos casos «se identifican y están todos tratados desde Salud Pública».
Según datos de la Conselleria, Epidemiología detectó 44 brotes de sarna hasta el 8 de noviembre, de los que 19 afectan a familias o domicilios, 12 a centros sociosanitarios y 11 a centros educativos. De este modo, aun a la espera del cierre del ejercicio, hasta noviembre ya se supera el total de brotes detectados en 2022.
Cabe matizar que el aumento de brotes en ámbitos educativos –excluidas las ‘escoletes’– probablemente se debe a la puesta en marcha de un protocolo de coordinación entre atención primaria y Epidemiología, para aplicar medidas ante la detección de casos.