El delantero francés del Atlético de Madrid Antoine Griezmann se convirtió este miércoles en el máximo goleador de la historia del conjunto rojiblanco, haciendo el gol 174 con el que superó a Luis Aragonés, aunque no pudo celebrar el pase a la final de la Supercopa de España con la derrota (5-3) ante el Real Madrid.
«Es para mí el balón, es increíble, un orgullo, muchas emociones al descanso pero había que volver al partido. A trabajar y seguir mejorando», dijo en declaraciones a Movistar Plus, recogidas por Europa Press, después de una amarga derrota en la prórroga.
El galo hizo un golazo en el primer tiempo para poner un 2-2 antes del descanso, con el cual pasó a Luis Aragonés. Griezmann, en su segunda etapa en el Atlético, marcó su primer gol de rojiblanco en septiembre de 2014 ante el Olimpiacos y, ahora, supera el récord de Luis Aragonés que dejó el ‘Sabio de Hortaleza’ en 1974.
Con todo, la pose del francés no fue ni mucho menos de celebración después de la eliminación en la Supercopa ante un Madrid que se llevó el billete en la prórroga. «Otra vez, muchos goles encajamos. Tenemos cosas que mejorar. Hay otro partido el jueves que viene, cada uno tiene que trabajar para descansar lo mejor posible y estar al 100%. Un partido bonito de jugar, con nuestra afición. Hay muchas ganas de esta Copa, el estadio estará lleno«, afirmó.
«Sabemos que es algo que tenemos que mejorar, hasta que no lo mejoremos pasarán partidos así. Es algo que representa el Atlético, ser una defensa fuerte, no hablo solo de la defensa, de todos. Estamos muy bien, con Álvaro, Memphis, Correa, los que juegan en banda, pero es mejor mirar lo que debemos mejorar y trabajarlo», terminó.