El asesor principal de Inteligencia Artificial e Innovación en el Goddard Space Flight Center y líder de la Estrategia de Tecnología de la Información de la NASA, Omar Hatamleh, ha señalado que, aunque tienen «muchas ventajas», los teléfonos móviles pueden tener «un impacto negativo» si no se controlan bien.
«Normalmente una persona de promedio tiene la capacidad de atención de 12 segundos. Con las nuevas tecnologías, con las redes sociales, hemos bajado de 12 a 8 segundos y la de un goldfish es de 9 segundos. Tenemos menos capacidad de atención que un goldfish«, ha asegurado en una entrevista a Europa Press el especialista en IA.
No obstante, ha matizado que los smartphones tienen también «muchas ventajas», ya que con ellos te puedes comunicar, aprender o resolver dudas. «Pero como se están utilizando ahora puede ser que, si no lo controlamos bien, tengan un impacto negativo», ha avisado.
Para minimizar el impacto negativo de estos dispositivos en los menores, Hatamleh hace un llamamiento a los influencers para que transmitan un buen uso de la tecnología. «Los influencers tienen un trabajo importante para que la tecnología impacte positivamente en la generación del futuro», ha remarcado.
Así las cosas, ha recordado que la generación joven «va a ser la que va a crear el futuro», por lo que hay que darles las «mejores herramientas para que sea una generación buena y disminuir los aspectos negativos que tienen los teléfonos, como que disminuyen la atención».
Hatamleh, que ha participado esta semana en el Dell Technologies Forum de Madrid, defiende que prohibir el uso de la Inteligencia Artificial a los menores «no es la solución». «La IA, como cualquier otra tecnología, tiene ventajas y desventajas pero lo diferente de la IA es que las dos están muchísimo más amplificadas que cualquier otra tecnología que tenemos», ha precisado.
Precisamente, ha explicado que actualmente se está avanzando en una regulación para que haya que poner en una imagen o en un vídeo si está desarrollado con IA, «para que la gente lo pueda distinguir». «Todavía no está completo pero estamos avanzando y teniendo mucho progreso para disminuir lo más posible los ámbitos negativos», ha celebrado.
REGLAMENTO EUROPEO SOBRE INTELIGENCIA ARTIFICIAL
La Unión Europea cerró la semana pasada un acuerdo histórico para fijar las primeras reglas con las que limitar los riesgos de la Inteligencia Artificial, que previsiblemente podrá entrar en vigor a partir de 2026.
Para el líder de la Estrategia de Tecnología de la Información de la NASA, esta regulación es «absolutamente necesaria» ya que el potencial de la IA tanto negativa como positivamente es «muy potente», por lo que, a su juicio, «tiene que haber un balance entre la regulación y la innovación».
Sin embargo, el experto en IA no apuesta limitar la tecnología en exceso. «Si limitas mucho vas a bajar la creatividad, la innovación y no vas a avanzar, pero si no pones nada va a ser un mundo loco. No sé si es perfecta la ley pero es un buen paso y va a afectar positivamente al sector para disminuir los riesgos y ayudar a la humanidad», ha comentado a Europa Press.
UN SISTEMA EDUCATIVO MÁS PERSONALIZADO
Esta tecnología está impactando en varios sectores de la sociedad, también en el educativo. Por ello, Hatamleh considera que hay que crear un sistema educativo «más personalizado» que no se centre solamente en los contenidos, sino en enseñar a los alumnos a tener un pensamiento crítico, a adaptarse a los cambios, ya que cada ser humano tiene «una capacidad intelectual muy diferente y cada uno aprende de manera diferente».
En este contexto, el especialista en IA sostiene que lo ideal es que la enseñanza se base en un sistema híbrido, es decir, que se combine en el aula el uso de los materiales tradicionales, como libros y apuntes, con los dispositivos tecnológicos y las ventajas que estos aportan en la educación.
«Tiene que ser un sistema híbrido. Obviamente se aprende muchísimo solo, con un dispositivos electrónico, pero para tener éxito en el futuro tienes que tener varias dimensiones de inteligencia», ha subrayado.
En concreto, Hatamleh ha hecho referencia a que se aprende mucho hablando con las personas, teniendo una conexión social. «El conectar con las personas, entender el ámbito, crear estrategias poder ver la personalidad de las personas, eso no se aprende detrás de un ordenador, se aprende interactuando con personas, aprendiendo, teniendo errores, así se aprende. Creo que el sistema óptimo sería un sistema híbrido», ha zanjado.