Desde hace ya poco más de una década Venezuela ha sido cuna de algunas de las bandas de rock más interesantes del idioma español, aunque los coletazos no siempre lleguen a España. Una de ellas es Viniloversus, el grupo liderado por la voz de Rodrigo Gonsalves apareció en la escena en 2007 con la peculiaridad de tener dos bajistas en lugar de dos guitarras, lo que desde el día uno los transformó en una banda más potente que muchos de sus contemporáneos.
Por eso es tan interesante que Viniloversus llegue este viernes a la Sala Mon de Madrid, el espacio que hasta 2018 era conocida como Sala Penélope y que hoy uno de los espacios históricos de la música electrónica de la ciudad transformada en un espacio clave de la música en vivo en la capital. Con varios artistas venezolanos demostrando que pueden llenar las salas capitalinas sin demasiados problemas es una oportunidad para la banda de expandir su base de fanáticos, y para los asistentes de descubrir uno de los grupos más explosivos de la escena latinoamericana.
Tienen 5 años sin venir a España ¿Cuál es la expectativa para el concierto?
Estamos emocionados de regresar a España. Aunque no hemos tocado muchas veces aquí, sabemos que contamos con una diáspora de fans venezolanos y algunos españoles que nos han escrito durante años para venir a tocar. Ambos shows serán especiales.
Esta gira ha sido una oportunidad para reconectar con el público tras 2020 ¿Cómo han recibido canciones más recientes?
Al igual que muchas bandas, la pandemia nos obligó a darle una pausa a los shows en vivo, aunque ya planeábamos un descanso internamente antes de que sucediera. Ahora estamos de regreso con más energía que nunca, trabajando en lo que será nuestro sexto álbum de estudio. Las nuevas canciones han tenido una excelente receptividad, pero lo mejor del disco está por venir.
VINILOVERSUS VUELVE AL RUEDO
Acaban de salir unas nominaciones a los Grammy con bastante presencia venezolana ¿Cómo se explica la evolución de esa escena dado el exilio masivo?
Recientemente, celebrando el lanzamiento del disco de Rawayana aquí en Miami, sentí que este momento que estamos viviendo en la música venezolana es particularmente especial. No solo por las nominaciones al Grammy latino de talentos venezolanos sino también momentos que rompen la simulación como ver a Rawayana en el Tiny Desk donde han tocado los artistas más grandes del mundo.
El logro de Luis Jimenez y Lasso (entre otros) siendo nominados como compositores de la canción del año, el éxito de Elena Rose, Danny Ocean, o La Vida Bohème nominados a mejor canción alternativa, y demás. Me enorgullece profundamente lo que está sucediendo con la escena venezolana en múltiples géneros musicales.
VVV, su último disco, tiene ya 4 años ¿Cómo se siente poder tocarlo de forma extensiva después de tanto tiempo?
Robert Smith de The Cure mencionó que con cada álbum, el desafío crece al intentar superar al anterior. Esa idea resuena con nosotros. Nuestras vidas y responsabilidades han evolucionado, y no queremos apresurar el proceso creativo. Nuestra meta es reflejar genuinamente nuestra fase actual como banda y hacer el mejor disco posible para capturar la etapa que estamos viviendo con las mejores canciones posibles. No estamos apurados, pero sí emocionados por compartir lo que venimos cocinando estos últimos años.
ROCK DE CLASE MEDIA
Sin ser una banda extremadamente grande han conseguido su propio espacio en la industria ¿Hay un hueco para el ‘artista de clase media’?
Definitivamente. Estamos satisfechos y agradecidos con nuestra posición. No es necesario ser Bad Bunny para valorar una carrera musical y conectar con tu audiencia. Esa conexión genuina con los fans es invaluable y no necesitamos que sea tan masiva. Nos permite tener proyectos en paralelo sin estar 100% atados únicamente a la banda. Siempre ha sido nuestra filosofía poder crecer en otras áreas que cada uno ha decidido explorar. No podríamos estar más felices.
Montarnos en un avión para volar a otro país y saber que contamos con un grupo de personas que quieren vernos en vivo y conectar con nosotros es algo que nos llena profundamente. Suena cursi pero me hace pensar en la frase de una de nuestras canciones: «Si ya tienes agua, ¿para qué quieres el mar?»
¿Hay algún grupo de aquí de España que estén escuchando?
En mi trabajo he tenido la oportunidad de conocer algo de la escena española. Soy super fan de C. Tangana. También, a pesar de que no escucho mucho rap de España, Kaydy Cain me ha llamado la atención y me parece divertido. También disfruto mucho lo poco que he escuchado de Çantamarta, con un integrante venezolano en su alineación. Hay muchísimo talento en España pero tengo que investigar más porque estoy seguro de que hay proyectos increíbles que no conozco.