Cada vez hay más abuelos que cuidan a sus nietos. De hecho, según encuestas como la de Aldeas Infantiles o la de Salud, Envejecimiento y Jubilación en Europa, entre otras, 1 de cada 4 abuelos se ocupa de sus nietos a diario y durante unas 7 horas cada jornada.
Si estos datos dejan claro su importante labor, no podemos olvidar que las cifras se incrementan en este tiempo cuando los niños tienen vacaciones y no hay colegio, ya que en ese tiempo los abuelos aumentan los cuidados.
Los abuelos aumentan los cuidados a sus nietos, y más en vacaciones
Hace ya muchos años que en las familias trabajan ambos progenitores, algo que ha llevado a que el papel de los abuelos sea aún más importante. No todos los padres pueden contratar ayuda externa para cuidar a los más pequeños de la casa y aunque así fuera, prefieren dejar a sus hijos con la familia.
Por supuesto, los abuelos son padres por encima de todo y nada les gusta más que ayudar a sus hijos, también les encanta pasar tiempo con sus nietos.
No obstante, en ocasiones se ven sobrepasados por todos los cuidados que implica ocuparse de sus nietos casi a jornada completa.
De hecho, muchos abuelos reportan episodios de estrés o ansiedad debido a la alta carga de trabajo, algo que también implica cansancio o incluso dolores físicos relacionados con el cuidado de niños pequeños. No hay que olvidar que cuidar de los pequeños implica un desgaste a nivel físico, ya que los niños no paran en todo el día.
Psicólogos y geriatras cada vez ven más abuelos en consulta por cansancio o dolores físicos
Tanto es así que los psicólogos y geriatras están viendo cada vez más casos en consulta: «Personas mayores que sufren agotamiento, estrés y ansiedad que puede acabar derivando incluso en depresión», dicen los expertos.
«El bienestar del nieto se acaba anteponiendo al suyo propio, por lo que los problemas de salud que ya sufrían se agravan: la hipertensión se acentúa, al igual que la artrosis. También es habitual sufrir estreñimiento y dolor crónico en las articulaciones y la espalda por el esfuerzo que les supone, así como dificultad para dormir por la noche derivada de ese dolor.
Es frecuente descuidar la alimentación y estas personas tienen un riesgo de desnutrición que puede afectar a enfermedades como la diabetes», cuenta Rosa López, geriatra del SEGG, que cuenta que justo ayer dos personas le reconocían sentirse esclavizadas por la necesidad de cuidar a varios nietos a la vez. «Los abuelos ya no tienen la misma vitalidad y la movilidad que imponen los nietos es enorme», explican.
No todos los padres pueden contratar ayuda externa
Unos abuelos que son indispensables ante el gran problema de la conciliación que existe en España cuando los dos progenitores trabajan con horarios poco compatibles con la crianza.
Para una cuarta parte, las tareas más frecuentes son llevar o recoger del colegio a los nietos o darles la comida o la cena mientras padres y madres trabajan. Y la tarea continua en las vacaciones de verano.
Y es que este porcentaje, el de que el 35% de los mayores de 65 años cuida a sus nietos varios días a la semana, es un porcentaje superior en 12 puntos a la media europea y muy por encima también de otros países como Francia, el 13%, o Alemania, el 15%, según los datos publicados por Eurostat.
Además, los abuelos son a veces un sostén económico y emocional de las familias. Casi la mitad ayuda económicamente a sus hijos y nietos. En tiempos de crisis, en 2015, llegó a ser el 80%, según un informe de Educo.