El nuevo espacio comandado por Carlos Moreno, del grupo Larrumba, ha elaborado una nueva carta «Un país para bebérselo, que ha contado con la inspiración gastronómica de las 17 comunidades autónomas de España.
La sonrisa de Carlos Moreno lo dice todo. En esta coctelería reina la familia, la libertad y la unión, y eso se nota con tan solo entrar a Harrison 1933: una decoración con las cortinas siempre abiertas para recibir a todos los públicos que se quieran mostrar libres. Así define Moreno este espacio en el que mantiene un guiño de esperanza a la libertad de los bares. Esta coctelería no entiende ni de definiciones, ni conceptos, es algo mucho más simple: libertad, buen rollo y transparencia.
Suelo enmoquetado, paredes de madera, vigas de hierro y un estilo como de club inglés, pero sin dejar de lado un ligero toque moderno, reciben a quien quiere traspasar la puerta de Harrison 1933, en la calle Recoletos. Son dos plantas bien amplias, con varias barras alargadas y mucho camarero dispuesto a dar el servicio más adecuado.
La inspiración, de algún modo, ayuda a ello: “El año es el del fin de la Ley Seca. Por tanto, es el del comienzo de la libertad en Estados Unidos. Queríamos hacer un bar donde la gente pudiera beber sin esconderse. Y, además, necesitábamos abrirnos y contarle a todo el mundo como hacíamos nuestros cócteles. No ocultamos nada”, destaca Moreno, que ha creado 15 combinados que radiografían la historia del arte junto a Raquel Espolio.
No contentos con este despliegue de cócteles, ahora presentan la segunda carta que recibe el nombre de «Un país para bebérselo», que ha contado con la inspiración gastronómica de las 17 comunidades autónomas de España. “Nuestro medio de transporte ha sido una furgoneta y todo lo que hemos aprendido ha sido para confeccionar cócteles cuyos sabores, ingredientes y técnicas hablen de sitios como Euskadi, Navarra, Madrid, Murcia… y de todas y cada una de las 17 comunidades autónomas que componen a España, así como Ceuta y Melilla”, específica Moreno.
SABORES DE TODAS LAS REGIONES EN HARRISON 1933
Las costumbres culinarias de cada región y su manera de entender la vida, así como sus recetas, fiestas y tradiciones, han sido las que han inspirado a cada uno de los integrantes del equipo de Moreno, que han aprovechado sus escapadas veraniegas para investigar nuevos formatos y formas de entender la gastronomía y, por lo tanto, la coctelería. Además, no han dejado escapar la oportunidad para visitar a coctelerías amigas, dejándose inspirar por sus formas de ver el oficio y de trabajar, incluso de Pepe Rodríguez, chef del restaurante El Bohío, con una estrella michelín.
Entre los cócteles podemos encontrar recetas de lo más curiosas que te dejarán el paladar con ganas de volver a Harrison 1933. Entre ellos, en el cóctel correspondiente al País Vasco desde el equipo de Moreno han querido representar el sabor de la gilda, el membrillo y el queso Idiazábal, convirtiéndose en una fusión en la que e combinan más de 10 técnicas diferentes. Por otra parte, Castilla y León está representada en un cóctel a través de la cecina, producto común de la comunidad que aporta un sabor agradable. Este cóctel incluye peras del Bierzo combinado con la cecina y el vino Rueda convirtiéndolo en una bebida tanto de día como de noche.
A través de un trabajo elaborado y diversas técnicas estos cócteles representan una nueva carta que Harrison 1933 ofrece ahora a sus clientes en horario de lunes a viernes, incluyendo conciertos en vivo en su planta inferior, en el que además de cócteles se sirven otras bebidas. Un guiño a la gastronomía española que Carlos Moreno no ha dejado escapar y que ahora se puede disfrutar en la calle de Recoletos.
