Las protestas por el asesinato del joven de 17 años, Nahel, tras saltarse un control de policía han desembocado en revueltas y peleas callejeras que se saldan con asalto a tiendas como la de Nike en París.
El asesinato de Nahel M el pasado martes a manos de la policía tras saltarse un control ha desencadenado una ola de revueltas y batallas campales en plena calle. A la par que una infinidad de manifestaciones reclamando justicia en diversas ciudades de Francia.
Estas revueltas se han saldado no solo con detenidos, solo este jueves se había retenido a 667 personas, sino también con vandalismo y robos en tiendas. Las redes sociales han sido el principal escaparate de los vídeos en los que se pueden apreciar a turbas de gente rompiendo escaparates de tiendas para desvalijarlas.
Ropa, motos, electrodomésticos… Todas estas tiendas han sido el objetivo de las mareas de personas que han aprovechado las concentraciones para delinquir. Una de esas tiendas a las que ha salido mal parada ha sido la de Nike. Centenares de encapuchados asaltaron ayer la tienda de la conocida marca en París. Recordar, que esta marca es la que, entre otros muchos patrocinios, es quien viste al Paris Saint Germain, equipo de fútbol de la ciudad y en el que juega la mayor figura del país, Kylian Mbappe.
Cabe destacar que los actos vandálicos y delictivos de unos no empañan las protestas de otros. Una cosa es manifestarse por lo que se considera una injusticia y otra bien distinta es aprovechar la coyuntura para robar, asaltar y sembrar el caos.
Las protestas y hechos vandálicos se han extendido por toda Francia; Lille, Marsella, Lyon o Niza son algunas de las ciudades donde se han registrado enfrentamientos que no solo han acabado con detenciones. Sino también con el asalto a comisarías e incendiado de edificios públicos.
Quién es Nahel M
El joven de 17 años asesinado en Nanterre era un estudiante de electricista que había comenzado a trabajar de repartidor para ayudar a su madre, también repartidora. No conoció a su padre, ni tampoco tenía hermanos.
Además, el joven asesinado era jugador de rugby en el club Los Piratas un equipo de Nanterre, que estaba bajo la supervisión de Ovale Citoyen, una asociación que a través del deporte lucha por la integración de los jóvenes más desfavorecidos.
Pese a que su sueño era ser mecánico, era un viejo conocido de la policía francesa. No tenía antecedentes penales, pero sí judiciales por resistencia a la autoridad y conducir sin licencia. De hecho, en 2022 declaró ante un juez de menores que le impuso «medidas educativas». Pero el fin de semana pasado fue arrestado y puesto bajo custodia policial por negarse a acudir a la citación del juez de menores al que tendría que haber acudido en septiembre.
El pasado martes, Nahel salió a trabajar por la mañana en un Mercedes amarillo, con matrícula polaca. Destacar que con 17 años no se puede conducir en Francia salvo que se haga acompañado de un adulto responsable. Y tras cometer varias infracciones, se inicia la persecución policial, que le lleva hasta el fatídico control.
Tras recibir el aviso, los policías le dieron el alto y se apostaron en las ventanillas del coche, pero Nahel no frenó y trató de huir. Momento en el que un policía le dispara a quemarropa y le atraviesa el peso de izquierda a derecha.
Al agente ya se le han abierto diligencias y dice estar muy arrepentido, según fuentes cercanas al policía afirman que «él no se levanta pensando en matar cada mañana».