El transporte de mercancías es uno de los elementos comerciales más importantes en el mercado contemporáneo, capaz de hacer que todo cuanto consumimos a diario salga de la fábrica y llegue a las tiendas físicas en cuestión de horas. Sin embargo, en industrias como la de la alimentación, para que esto suceda es prioritario disponer de ciertos recursos de refrigeración dentro de los propios vehículos. Unas cámaras que garantizan que no se rompa en ningún momento la cadena del frío para así conservar las propiedades cualitativas del producto en cuestión. Así que hoy queremos hablarte de los sistemas más destacados en esta materia, tal y como es el caso de las furgonetas isotérmicas.
Tipos de mercancías que se pueden transportar
Las furgonetas isotérmicas son vehículos que disponen de un sistema aislado térmicamente para así poder transportar todos aquellos productos que son sensibles a los cambios de temperatura. Para ello, se han equipado con las carrocerías isotérmicas: un compartimento interior que garantiza la máxima estabilidad del ambiente. Es decir, los grados que hay cuando sale de la fábrica son los mismos que presenta cuando llega al destino. Pero, ¿cuáles son los artículos que se suelen transportar con este tipo de vehículos? Veamos algunos de los más comunes.
La industria de la alimentación es la que más aprovecha este tipo de sistemas de aislamiento. Los productos perecederos, como la frutas, verduras, carnes, pescados, congelados o, entre otros, lácteos, se suelen dañar en gran medida con las alteraciones de la temperatura. Lo cual provoca que la salud de los consumidores se ponga en peligro. Por consiguiente, quienes disponen de una flota de vehículos en dicho sector, están obligados a supervisar continuamente el estado de sus cámaras isotérmicas para evitar que haya posibles fugas durante el transporte en cuestión.
De igual modo, la industria farmacéutica y la química también suelen requerir de este tipo de furgonetas para el transporte de sus mercancías. Los medicamentos, las vacunas o los productos biológicos, entre otros, no pueden perder su correcta climatización en ningún punto. De ahí que este tipo de revestimiento sea un elemento clave en las bases de bienestar de la sociedad moderna. Por consiguiente, resulta fundamental que los transportistas sepan qué especialistas en revestimientos isotérmicos son los mejores en la actualidad. Unos profesionales que mantendrán la flota de vehículos en perfectas condiciones para realizar todos los desplazamientos necesarios en cada caso.
¿Cómo hacer una cabina isotermo en una furgoneta?
Para que el vehículo sea óptimo en lo que respecta al transporte de este tipo de mercancías, los fabricantes de furgonetas han de delegar funciones en quienes se encargan de realizar el revestimiento en cuestión. Unas compañías que deben contar con todas las homologaciones pertinentes para así evitar posibles problemas legales. En este punto, acudir a los fabricantes de estas cabinas para que sean ellos mismos quienes las instalen se presenta como la opción más económica de todas.
El revestimiento isotermo es el más eficiente de todos, resolviendo la labor de aislar un vehículo con absoluta facilidad y rapidez. Hay que destacar que, si se acude a los expertos adecuados, los problemas más comunes desaparecen de la ecuación. Este es el caso de tener una furgoneta con apertura lateral; sin embargo, dichas compañías se encargan de revestirla igualmente para cerrarla de forma permanente, convertirla en un portillón o darle uso sin limitaciones de por medio. ¡Tú decides cómo quieres que sea tu flota de vehículos!
Dicho revestimiento se lleva a cabo con láminas de poliéster, fibra reforzada y un aislante interior, lo cual mantiene aislada la zona de carga de forma drástica. Asimismo, hay quienes instalan todo tipo de complementos como carriles especializados para mantener productos cárnicos colgados o puntos LED en esta cámara de la furgoneta. Un proceso que se debe resolver con la máxima diligencia y, posteriormente, pasar todos los controles pertinentes. Recordemos que es la salud del conjunto de la población lo que está en juego: cualquier error puede salir muy caro.