El municipio de Plasencia, en la provincia de Cáceres, se ha alzado con el Premio Eolo a la Integración Rural de la Eólica en su duodécima edición. Un galardón que reconoce el esfuerzo de este modélico municipio en su desarrollo eólico; concretamente, en la instauración de los parques Merengue y Merengue II impulsados por Naturgy, que está consiguiendo «la máxima sintonía y compatibilidad con el resto de las actividades económicas, culturales y ambientales del territorio”, tal y como han destacado desde la Asociación Empresarial Eólica (AEE).
La llegada de la energía eólica en el municipio se ha concretado en la instalación de 26 aerogeneradores con una potencia conjunta de 89 MW, repartidos entre los 39 MW del parque eólico Merengue y los 49 MW del parque eólico Merengue II, que está previsto que entre en operación este año.
La multinacional energética ha convertido a la energía eólica en un nuevo motor para la economía placentina, sin perder la vocación de integrarse en el territorio y asumir la responsabilidad de generar valor compartido para sus vecinos, como nuevas oportunidades de empleo y desarrollo socioeconómico, además de promover iniciativas enfocadas en la educación.
Un proyecto que además ha hecho que el Ayuntamiento de Plasencia haya visto beneficiadas sus arcas municipales gracias a los impuestos que recibe de los parques eólicos, llegando a la suma de 4.512.017 €, importante fuente de financiación del municipio y que posibilita acometer actuaciones y servicios de una mayor calidad que convierten a Plasencia en una mejor ciudad para vivir. Del mismo modo, en relación al empleo, gracias a la instalación de los parques se han creado nuevos puestos de trabajo, lo que ha colaborado a que muchos jóvenes con perfil técnico puedan desarrollar su profesión, evitando su salida a otras ciudades.
Además, son un importante aliado para el impulso de la cultura en la ciudad, así como para otras iniciativas sociales, a través del patrocinio de eventos como el Festival Plasencia Abierta o la exposición ‘Las Edades del Hombre’. También Naturgy ha ayudado en el caso de la accesibilidad a monumentos de Patrimonio ubicados en el entorno de los proyectos, en coordinación con la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Extremadura.
En el ámbito ambiental, la ciudad se ha beneficiado de acciones tales como la recuperación de 20 hectáreas del alcornocal del Paisaje Protegido del Monte Valcorchero, cercano al Parque Nacional de Monfragüe, la creación de un muladar, así como la realización de estudios y proyectos con carácter ambiental durante todo el periodo de explotación de los parques. En el ámbito social, este planteamiento de Naturgy en Plasencia ha ayudado a paliar los efectos de vulnerabilidad energética en el municipio, con la instalación de un autoconsumo fotovoltaico en el Monasterio de Nuestra Señora del Puerto de Plasencia para ayudar a reducir su factura energética.
La educación ha sido otro de los aspectos fundamentales en los que la implantación de la eólica en Plasencia ha colaborado. Así pues, la Fundación Naturgy mantiene un programa de formación profesional para la empleabilidad que solo en 2022 benefició a cerca de 3.100 alumnos extremeños, favoreciendo así la educación, a la vez que el empleo, en la ciudad, potenciando así la lucha contra la España vaciada.
Y todo lo anterior, se lleva a cabo con el máximo respeto e integración de la actividad de generación de energía eólica con los usos tradicionales del territorio. No solo se sigue haciendo el uso ganadero extensivo que desde siempre ha formado parte de la Sierra del Merengue, sino que se ha ayudado a que sea una actividad más rentable, gracias a la mejora y adaptación de caminos, las medidas de protección contra incendios y la colaboración y apoyo mutuo a los ganaderos del personal de los parques eólicos.
Energía renovable para 36.000 hogares extremeños
La producción renovable de Naturgy en Extremadura en 2022 alcanzó los 128 GWh de energía renovable, cantidad que equivale al consumo eléctrico anual de 36.000 hogares.
El grupo energético dispone en la región de una potencia en operación de 59 MW repartida entre el parque eólico Merengue, en Plasencia, que aportó una producción cercana a los 125 GWh, y a la planta fotovoltaica Miraflores, en Castuera (Badajoz), que aportó 3,7 GWh. Esta producción permitió reducir en más de 80.000 toneladas las emisiones de gases contaminantes y de efecto invernadero.
Un plan que será aún más positivo de cara al resto de 2023, ya que la potencia instalada de Naturgy en Extremadura crecerá de forma extraordinaria. Así pues, a final de año la compañía contará con un total de nueve instalaciones en desarrollo, construcción y explotación en la región, que se convertirá en una de las que concentra más inversión de Naturgy en proyectos renovables a nivel nacional.