Tras cinco años de parón en los que se ha estado recuperando de una importante crisis personal, el cantante murciano estrena ahora su segundo álbum de estudio, ‘El Príncipe’, con el que asegura que ya no necesita la aprobación de los demás.
Después de la tormenta, siempre llega la calma. Quizás este es el punto de inflexión que ha hecho llegar hasta aquí a Blas Cantó, que vuelve tras cinco años de parón con fuerzas renovadas. Con una sonrisa que ahora brilla de ilusión, el artista ha sabido reponerse ante los altibajos que se han ido presentado en su carrera, sobre todo, después de su elección para acudir al Festival de Eurovisión de 2020.
Su esfuerzo incansable y su círculo de amigos han provocado que salga ahora ‘El Príncipe’, en el que el cantante asegura que está contento. «Después de cinco años sin sacar un álbum, es un privilegio, me siento muy afortunado de tener este segundo álbum en las manos aunque haya pasado ese tiempo. Me siento contento con el resultado porque ha costado llegar aquí a nivel emocional, pero también necesitaba vivir cosas para poder contarlas», ha explicado Cantó.
Al hilo del tema sobre la felicidad, algo que en estos últimos años ha sido una carrera de fondo para el artista, que ahora considera que la felicidad no se engloba en un solo aspecto. «Los momentos de felicidad van y vienen. No podemos englobar la felicidad en solamente una palabra o un sentimiento único, porque a lo largo de un mismo día puedes sentir muchas cosas y al final, escribirlas, es importante», se ha sincerado Cantó.
Una felicidad que se une al resto de emociones que ahora el artista murciano refleja en su último álbum, un disco en el que se ha permitido sentir «nostálgico, pero con optimismo, y donde la melancolía se ha visto de otra manera. Cuando he tenido la necesidad de ser nostálgico, lo he hecho en canciones a tempo, divertidas, en las que los ritmos son distintos a lo que decía mi corazón, asique de alguna manera se compensaban las emociones».
«EL PRÍNCIPE» CON UN OBJETIVO: SER TÚ MISMO
El título de este último álbum de Blas Cantó refleja su salida de la oscuridad. En el que ha conseguido desahogarse de una forma optimista después de que «la imagen de mi se hiciese muy blanca. Lo que la gente esperaba de mí era algo que no sé si podía darles. Esperaban que cantase canciones muy agudas, que tuviese una presencia muy elegante, que fuera correcto a la hora de hablar…De algún modo lo que se puede esperar de un príncipe«.
Este disco le ha ayudado a borrar todos esos mitos e ilusiones sobre los príncipes azules, que según Blas, no existen. «Escribiendo este álbum me di cuenta de que, lo que sucedía en mi casa, era totalmente diferente a lo que la gente sabía de mí, por eso tenía que traerlo a mis canciones, a mi escenario, a mi manera de vestir… Como yo soy en mi día a día. Me parecía triste que de alguna manera no se representara lo que yo soy y lo que la gente pensaba que yo era«, ha explicado Cantó.
Por ello ahora, con este nuevo álbum explora historias que le han permitido pasárselo bien y «por fin escribir sobre estar en la noche y pasármelo bien, sobre la sexualidad, sobre estar ebrio…Situaciones que me han permitido luego no fingir a la hora de escribir una canción«. Ahora solo queda disfrutar de ‘El Príncipe’ y de la vuelta de este artista, que aún tiene mucho que regalarnos.
