Iñaki Urdangarín y Ainhoa Armentia están disfrutando de unos días de vacaciones por Semana Santa en Palma de Mallorca. Así lo ha revelado el ‘Diario de Mallorca’, que asegura que el ex duque de Palma y su novia han elegido para su estancia en la isla en la que tantos momentos pasó con la Infanta Cristina, un exclusivo hotel de cinco estrellas llamado Mar de Illetes cuyos precios van desde los 300 a los 800 euros la noche.
Pero al margen de no escatimar en gastos -lo que resulta cuanto menos llamativo porque el exyerno del Rey Juan Carlos no tiene trabajo- si algo ha llamado la atención es que el vitoriano ha elegido para su última escapada romántica un hotel que está a solo diez minutos del Palacio de Marivent. Para muchos, una nueva manera de desafiar a la Familia Real tras el fin de semana que pasó recientemente con Ainhoa en Baqueira Beret y en el que presuntamente se habría alojado en la urbanización de la Pleta, residencia de su exfamilia política cuando visitan la estación de esquí.
Una estancia en Palma de Mallorca en la que ha coincidido con el Rey Felipe VI, que se encuentra en la isla disfrutando de unos días de descanso sin la Reina Letizia, pero con la Reina Sofía, que cumpliendo con la tradición lleva instalada en Marivent varios días con su hermana la Princesa Irene de Grecia.
Una visita sorpresa que ha trascendido gracias a las imágenes que ha compartido en su cuenta de Instagram el popular restaurante mallorquín Sandro, orgullosos porque el monarca les eligiese para disfrutar de una cena con un grupo de amigos este domingo: «Ayer tuvimos el honor de recibir al rey don Felipe en nuestro restaurante. Fue un momento muy especial para todo nuestro equipo y estamos muy agradecidos por su visita», han publicado.
Una cena informal en la que, como informa el diario ‘Última Hora’, Don Felipe y sus amigos degustaron platos típicos italianos; de entrantes a compartir focaccia de romero, carpaccio de gambas y vitello tonnato, y como plato principal el Rey disfrutó de una pasta cacio e pepe. Finalizaron la velada con un surtido de postres en el que había, entre otros dulces, panna cotta y tiramisú.
Por el momento se desconoce cuántos días pasará el monarca en Palma de Mallorca y si la Reina Letizia y sus hijas viajarán a la isla a finales de esta semana, cuando Leonor comience sus vacaciones en el UWC Atlantic College. Lo que sí parece seguro es que no estarán en la tradicional misa del Domingo de Resurreción en la Catedral de Palma, aunque quizás haya un cambio de última hora y los Reyes decidan, contra todo pronóstico, retomar una tradición Real a la que hace cuatro años que no asisten.