Aunque exista una desconfianza popular, los antidepresivos son realmente eficaces y seguros. Al igual que ocurre con todo medicamento, hay que seguir ciertas normas tanto a la hora de consumirlo, como a la hora de dejar de hacerlos. En los casos de depresión, lo más común es que las personas que han padecido este tipo de trastorno abandonen su consumo unos seis meses después de que la enfermedad haya desaparecido, aunque no sea algo recomendado por los especialistas. A continuación te contaremos qué le puede a tu organismo si dejas los antidepresivos de golpe.
1Los antidepresivos no son moco de pavo
Más allá que seis meses parezca mucho tiempo, la depresión no es un chiste y los antidepresivos no son un ibuprofeno. Posiblemente, este sea el motivo por el cual la primera recomendación sea no ingerirlos más tiempo del estrictamente necesario, debido a que alargar el tratamiento puede hacer que sea mucho más difícil el poder dejarlos, y que además aparezcan distintos problemas secundarios. De acuerdo al Consejo General de Farmacéuticos, únicamente el 28% de los pacientes que consume estos medicamentos en España cumple adecuadamente el tratamiento.