San Abdías Profeta es la figura religiosa que se recuerda el 19 de noviembre

San Abdías Profeta es una figura del Viejo Testamento que se recuerda el 19 de noviembre, de hecho, es el cuarto profeta de este importante texto bíblico. Realmente Abdías no es un nombre que sea muy común en España, pero si tienes la fortuna de conocer a alaguno, o se encuentra entre tus familiares o allegados, hoy es el día en el que debes felicitarle por su onomástico, ya que sólo son 33, según la información suministrada por el Instituto Nacional de Estadística.

San Abdías Profeta

San Abdías Profeta

San Abdías Profeta se trata de uno de los profetas menores del Viejo Testamento de la Biblia, que es en donde se encuentran recogidos los libros canónicos de los profetas menores y mayores, siendo distinguidos entre ellos por la cantidad o extensión de los escritos que se han conservado de cada uno.

A San Abdías Profeta se le tiene atribuido el más conciso de los libros que contienen los escritos de todos los profetas menores, que se relatan desde el libro de Oseas hasta el libro de Malaquías, entre los cuales se encuentra el de San Abdías Profeta, que sólo se encuentra compuesto por 21 versículos. En el Antiguo testamento tan sólo se mencionan a 12 Abdías y el más importante de ellos es San Abdías Profeta.

Se trata de una profecía breve en la que se profetiza de la caída de Edom, y de la forma en que se iban a unir todas las naciones, de acuerdo con las Sagradas Escrituras, para actuar en su contra. Edom fue una antigua región del mediterráneo, en la que existía una fuerte presencia de hebreos.

Lamentablemente, no ha podido conservarse registro histórico alguno sobre la vida de San Abdías Profeta, pero el significado, así como el origen de su nombre sí que han sobrevivido a pesar todo el tiempo que ha transcurrido. El origen de Abdías es totalmente hebreo y puede ser traducido literalmente como ‘servidor o adorador de Yahvé’, quien es el señor de Israel, tal y como dicta la tradición hebrea.

No se sabe nada con relación a su familia o el período de tiempo en que vivió, ni su lugar de nacimiento, lo único que ha podido concluirse es que el autor de esas profecías que llevan el nombre de Abdías proviene de un autor que pertenecía al reino de Judá. La breve profecía indica que Dios convocó a las naciones en contra de Edom, la cual confía en que podrá responder de manera dura, rápida y contundente, pero todo ello será en vano.

Se dice que los ladrones la destruirán por competo, que los aliados y los amigos le darán la espalda, que su sabiduría le fallará y que la razón de estos castigos proviene de la conducta que mostraron hacia Judá, y la indignidad mostrada con su conducta, por lo que se acercaría el día en que Yahvé, para la ruina de Edom, y que será compartida por la ‘casa de Jacob’ y por la ‘Casa de José’, y se ampliarían las fronteras de Israel.

Continúa explicando que los salvadores vendrán desde el montaje de Sion, y se juzgara el montaje de Esaú, restableciéndose la ley de Yahvé.

¿Era Abdías su verdadero nombre?

¿Era Abdías su verdadero nombre?

Ahora bien, el hecho de que su nombre sea traducido como servidor de Yahvé hace que muchos historiadores piensen que no se trata de nombre en sí mismo del profeta, sino que esa fue la manera en que los demás se dirigían a él dentro de su comunidad o puede ser que haya sido su apellido, y aunque no es muy conocido en el mundo cristiano, sus profecías son muy apreciadas y respetadas por la Iglesia Católica.

El 19 de noviembre no sólo vamos a recordar a San Abdías Profeta, sino que también es el día en el que el Santoral Católico se ha reservado las honras para muchos otros hombres y mujeres no tan conocidos de puertas hacia afuera de la Iglesia Católica, pero que son muy estimados de puertas hacia dentro, por su videncia, su santidad, sus obras y lo que representaron para la fe cristiana, entre los cuales se encuentran:

San Azas, San Bárlaam, San Eudón de Le Puy, San Federico Jansoone, San Máximo de Cesárea, San Simón, Santa Matilde de Hackeborn, Beato Jacobo Benfatti y Beato Santiago Benfatti.